Consumo interno crece en septiembre pese a efectos adversos por sismos

El consumo interno en el país aceleró el paso al cerrar el tercer trimestre de este año, luego que las personas acudieron a las tiendas de autoservicios y conveniencia para comprar víveres por los sismos que azotaron el centro y sur del país el pasado septiembre.

     El consumo privado en México aumentó 0.8% durante septiembre con respecto a agosto, en términos ajustados por estacionalidad, impulsado por las compras de bienes y a pesar del débil desempeño del sector de los servicios, reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.

     El consumo privado del país registró así su segundo ascenso mensual consecutivo, tras haber caído 0.1% en julio contra junio, y el crecimiento más alto de los últimos cinco meses. Además, acumuló seis avances en los primeros nueve meses de este año.

     En términos anuales, el consumo interno se aceleró durante el noveno mes del año al avanzar 3.4% contra septiembre de 2016, en términos desestacionalizados de Inegi, como también se conoce al organismo encargado de recabar los datos económicos y sociales del país.

     Hace un año, en septiembre de 2016, el consumo privado mostró un incremento mensual de 0.4% y otro anual de 3.7% frente al mismo mes de 2015, también en cifras ajustadas por estacionalidad.

     En términos desagregados, el consumo de productos nacionales creció 1.6% mes a mes y 2.9% frente a septiembre del año pasado, mientras que el de servicios bajó 0.1% en términos mensuales y subió 3.4% en cifras anuales, también con cifras ajustadas por temporalidad de Inegi.

     Por su parte, las compras de productos importados avanzaron 2.3% en septiembre contra agosto y ascendieron 6.6% año a año, en datos ajustados de Inegi.

     El desempeño de los componentes del consumo interno refleja que los sismos que afectaron a la Ciudad de México y otras entidades del país en septiembre, afectaron la actividad económica, particularmente el sector de los servicios.

     Sin embargo, muchos mexicanos acudieron a las tiendas para comprar productos de primera necesidad, como alimentos y medicinas, para consumirlos o donarlos a las víctimas de los terremotos, que tuvieron epicentros en Chiapas y Morelos.