El faltante en las cuentas que registran las entradas y salidas de capital de la economía por intercambios comerciales o financieros, fue de cinco mil 528 millones de dólares durante el tercer trimestre del año, informó el Banco de México en su reporte sobre la cuenta corriente.

     Como porcentaje del producto interno bruto, el déficit disminuyó desde el 2.3% reportado entre julio y septiembre del año pasado hasta el nivel de 1.8% actual, lo que da una señal de alivio a la salud de las finanzas públicas del país.

     Hace un año, en este mismo lapso, el déficit de cuenta corriente era de seis mil 174 millones de dólares, o 10.4% más que el registrado en el tercer trimestre del año.

     Para muchos economistas, los desequilibrios en la cuenta corriente son, por lo general, síntomas de problemas al interior de una economía, sobre todo cuando crecen, ya que pueden derivar en súbitos movimientos del tipo de cambio, que a su vez pueden generar inflación y desatar mayores desbalances económicos.

     Este faltante, sin embargo, se compara negativamente con el superávit de 129 millones de dólares registrado en el segundo trimestre del año, de acuerdo con las cifras del Banco de México.

     “El aumento anual en el déficit comercial petrolero se vio contrarrestado por  menores déficits en la balanza comercial no petrolera y en la balanza de ingreso primario, así como por un incremento en los superávits de las cuentas de remesas y de viajes”, dijo el Instituto Central, en su reporte sobre la cuenta corriente. “El menor déficit de la balanza comercial no petrolera se observó en un contexto en el que el fortalecimiento de la actividad económica a nivel global ha contribuido a que las exportaciones manufactureras de México continúen recuperándose, en especial las de productos automotrices, y en el que el tipo de cambio real se ha ubicado en niveles elevados”.

    No obstante, el desempeño financiero del país en los primeros nueve meses del año permitió que el déficit de cuenta corriente como porcentaje del producto interno bruto bajara de 2.5% entre enero y septiembre de 2016 a 1.6% en el mismo lapso de este año.

     De mantenerse este paso, entonces el déficit de cuenta corriente podría ser el menor desde 2012, cuando cerró el año en un nivel de 1.4%, de acuerdo con los datos de Banco de México.

     Si bien la reducción del déficit de cuenta corriente es una buena noticia porque refleja un buen entorno financiero, algunos analistas no descartan que ello podría verse amenazado en el futuro por algunos riesgos que persisten sobre la economía.

     “Creemos que continúa siendo importante el monitoreo de los niveles de déficit en la cuenta corriente y de la manera en la que éste es financiado”, escribió Luis Adrián Muñiz, economista con Vector Casa de Bolsa, en un reporte. “Si bien pareciera que el riesgo ha disminuido en el corto plazo, eventuales sorpresas que afecten nuestro balance externo podrían contrarrestar los esfuerzos para diferenciar la economía de otras emergentes, en un contexto de normalización monetaria en los Estados Unidos”.

 

 

 



Fecha de publicación: 24/11/2017

Etiquetas: México Banxico déficit cuenta corriente