Inflación en México cierra 2017 con mayor aceleración en 17 años

9 de ene. (Sentido Común) -- La inflación en el país cerró 2017 por encima de las expectativas de los analistas e incluso de las autoridades, un fenómeno que se repitió durante prácticamente todo el año, a pesar que desde algunos meses se esperaba que ésta perdiera fuerza conforme algunos factores que presionaron los precios al inicio de año se diluyeran.

     Sin embargo, los precios al consumidor en el país finalizaron con el mayor avance en los últimos 17 años, impulsados por el crecimiento de los precios de combustibles como las gasolinas y el gas LP a lo largo del año, así como la depreciación que ha acumulado el tipo de cambio recientemente.  

     La inflación se aceleró 0.59% durante diciembre con respecto a noviembre, alentada por los precios del jitomate y de productos relacionados con la temporada vacacional de diciembre.

     De esta manera, los precios al consumidor alcanzaron una tasa interanual de 6.77% al cierre de 2017, reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.

     Así, la inflación registró su mayor aceleración para un año desde el 2000, cuando avanzó 8.96% con respecto a 1999, de acuerdo con datos de Inegi, como también se conoce al organismo encargado de recabar los datos económicos y sociales del país.

     El desempeño de los precios al consumidor durante el año pasado resultó mayor al que anticipaban los economistas encuestados por Infosel, quienes esperaban que un incremento mensual de 0.58% y otro anual de 6.76%.

     La inflación, además, cerró 2017 por arriba del rango objetivo interanual de Banco de México de 2 a 4%, algo que no ocurría desde diciembre de 2014, cuando los precios al consumidor subieron 4.1% con respecto a 2013.

     En términos desagregados, el componente subyacente de la inflación, o aquel que excluye precios volátiles como agropecuarios o energéticos, creció 0.42% durante diciembre y 4.87% año a año.

     En este caso, los avances resultaron menores a los que estimaban los analistas encuestados por Infosel, quienes pronosticaban un incremento mensual de 0.48%, por lo que anticipaban que la inflación subyacente cerraría 2017 en 4.91%.

     Los precios de las mercancías aumentaron 0.32% y los del sector de los servicios 0.5%, ante el alza de los costos por la temporada vacacional. En particular, los precios del transporte aéreo crecieron 22.7% y los servicios turísticos en paquete subieron 7.43%.

     Por su parte, el componente no subyacente de la inflación avanzó 1.09% durante el mes pasado, con lo que registró un incremento anual de 12.6%. Los precios de productos agropecuarios mostraron un alza de 1.8%, mientras que los energéticos y las tarifas autorizadas por el gobierno ascendieron 0.7%.

     Al interior de este componente, los precios del jitomate mostraron la mayor alza con un incremento de 42.9%, mientras que la calabacita aumentó 26.8% y los precios del huevo ascendieron 5.8%.

     Si bien estos productos están fuera del alcance de acción de la política monetaria, algunos economistas consideran que la persistencia de presiones inflacionarias en productos agropecuarios es un fenómeno que debe vigilarse de cerca.

     “Sigue preocupando el comportamiento de frutas y verduras que en el año tuvieron aumentos superiores a los de años pasados”, escribió el equipo de estrategias de mercado de Finamex Casa de Bolsa en un reporte. “Los genéricos con mayores incidencias en la quincena fueron jitomate, huevo y gasolina”.

     El avance de los precios de hecho ya era de alguna forma esperada por el Banco de México, cuya junta de gobierno dijo, en su último comunicado de política monetaria, que los precios acelerarían nuevamente en el último mes del año y terminarían por encima del registro de noviembre.

     De ahí que el cuerpo colegiado del Banco de México responsable de dictar el rumbo de la política monetaria acordó, por unanimidad, elevar las tasas de interés en diciembre en un cuarto de punto porcentual, de 7 a 7.25%.

     El Instituto Central aumentó las tasas a pesar de que a principios del segundo semestre del año los analistas y los mercados anticipaban que el banco central no anunciaría nuevos movimientos de política monetaria hasta el segundo semestre de 2018.

     Pero ahora los precios sorprendieron al alza y los economistas estiman que Banco de México volverá a subir su tasa de referencia, a 7.5%, en la reunión de febrero, pese a que muy probablemente los precios al consumidor bajarán en la primera quincena de enero.

     De hecho los precios al consumidor descenderán en la primera mitad de enero ya que incorporarán el incremento en los precios de las gasolinas que anunció el gobierno federal hace un año, un impacto que ya no se registrará en la medición de la inflación en 2018.

     De ahí que al menos en los primeros meses de este año la inflación mostrará un desempeño menor al que registró durante el inicio del año pasado.

     El alza de la inflación “probablemente impulsará a Banxico a elevar las tasas de nueva cuenta en su reunión del 9 de febrero”, escribió Edward Glossop, economista para Latinoamérica en la consultora británica Capital Economics, en un reporte. “Sin embargo, el punto principal es que la inflación retrocederá con fuerza en el primer trimestre de este año”.

     Además, Banco de México muy probablemente estará atento al desempeño de las expectativas inflacionarias para tomar sus decisiones de política monetaria. Éstas siguen siendo un factor de preocupación ya que el mercado ve la inflación aún en niveles altos e incluso espera que cierre este año por arriba del límite superior de su rango objetivo de 4%.

     No obstante, el ritmo que muestren los precios al consumidor durante las próximas semanas y la velocidad con la que empiecen a descender determinará si el Instituto Central mueve de nueva cuenta la tasa de referencia al alza.

     “Dados los niveles de la inflación y el débil anclaje de las expectativas, nosotros vemos mayores riesgos de que la inflación terminará 2018 por arriba de 4%”, escribió Alberto Ramos, economista para Latinoamérica de Goldman Sachs, en un reporte. “El caso para mantener las tasas  en la reunión [de Banxico] en febrero, dependerá de una sorpresa positiva de la inflación” en enero.