México multa a GM con 1.2 mdp por vender autos sin certificado ambiental

La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente sancionó a General Motors de México, la filial de la automotriz estadounidense GM, con un millón 200 mil pesos (68 mil 180 dólares) por importar y comercializar 96 vehículos que no contaban con certificados de cumplimiento ambiental.

     Las marcas que no contaban con el certificado son el Corvette CPE modelo 2015 y el SRX de Cadillac modelo 2016, dijo Profepa, como también se conoce a la entidad encargada de proteger al medio ambiente en México, en un comunicado.

     “Profepa constató que del 13 septiembre del 2015 al 18 de julio de 2016, la empresa importó y comercializó en el territorio nacional 96 vehículos automotores nuevos sin contar con 2 certificados NOM de cumplimiento, mismos que fueron obtenidos con posterioridad a la importación y comercialización”, dijo la dependencia.

     La Procuraduría agregó que las empresas deben contar con los certificados ambientales antes de importar las unidades, por lo que realiza constantes revisiones para verificar que las automotrices cuenten con esos documentos.

     Con los certificados “se asegura que éstos [autos] cumplan con los límites máximos permisibles de emisiones a la atmósfera y de ruido”, agregó la dependencia, en su comunicado.

     La compañía, por su parte, dijo que los vehículos que presentaban las irregularidades, comercializados entre septiembre de 2014 y julio de 2015, ya cuentan con sus respectivos certificados y no representan afectaciones para los consumidores.

     “A esta fecha [los autos] han obtenido ya los certificados correspondientes y cumplen con la normatividad aplicable, pudiendo ser usados sin restricciones y no representan riesgo alguno para los clientes de la marca”, dijo la empresa, en un comunicado.

     General Motors, sin embargo, no dijo si acudirá a los tribunales judiciales para apelar la sanción de Profepa o si, por el contrario, pagará la multa.

     Este tipo de sanciones no son las primeras que impone la Procuraduría a una armadora. Hace seis meses, Profepa sancionó a FCA México, la filial de la ensambladora de autos bajo las marcas Fiat y Chrysler, con 15.9 millones de pesos (900 mil dólares) por comercializar ocho mil 97 vehículos que no contaban con certificado.

     En esa ocasión, las marcas vendidas sin esos documentos fueron Mitsubishi, Chrysler, Dodge, Fiat, Alfa Romeo, Jeep, Cherokee y RAM.