Inflación en México desacelera en primera quincena marzo y queda debajo de esperado

La dinámica de precios en México continuó su camino de atenuación el tercer mes del año, sumando los primeros 15 días del periodo una nueva sorpresa positiva, aunque sin estar libre de riesgos.

     Los precios al consumidor en el país aumentaron 0.15% en la primera mitad de marzo respecto a los 15 días previos, el menor avance para un lapso similar en los últimos tres años, dio a conocer el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

     El avance, no solo desaceleró respecto de febrero (0.16%), si no que constituyó el tercero menos acelerado de las últimas 11 quincenas y además quedó por debajo de las estimaciones que hicieron los economistas encuestados por Infosel, quienes esperaban un avance de los precios de 0.26% en la primera mitad del mes.

     Marzo podría encaminarse a ser el quinto mes consecutivo en que la inflación al consumidor es más baja que la anticipada por los expertos y, salvo por el tropiezo de enero, muestra desaceleración.

     Los productos que más presionaron al alza la inflación de la quincena fueron el transporte aéreo con un avance de 17.96%, seguido del limón con un incremento de 15.29%, los restaurantes y similares con 0.56%, los servicios turísticos en paquete con 4.86% y la tortilla de maíz con 0.70%, entre otros.

     Por el contrario, parte de estas presiones fueron parcialmente contrarrestadas por las bajas de 2.43% en el gas doméstico LP, de 4.75% en el jitomate, de 1.13% en el pollo, de 14.4% en los nopales y de 1.15% en el huevo, entre los principales.

     Con el avance de la quincena, la inflación creció a una tasa interanual de 7.12%, el menor nivel desde enero de 2022 cuando estuvo en 7.07%, de acuerdo con datos del organismo responsable de recabar la información económica y social en el país.

     El desempeño de los precios al consumidor en la comparación anual también fue inferior a lo estimado por los analistas, que vaticinaron un 7.27%.

     “Aunque la mejora en las cifras es notable, habrá que guardar prudencia en la interpretación, pues gran parte del movimiento se debe a lo observado con el componente no subyacente”, escribió en un reporte Marcos Daniel Arias Novelo, economista de Monex Casa de Bolsa.

     El especialista señaló que la inflación no subyacente, relacionada con alimentos y energía, desaceleró de 5.37 a 4.15%, por subsidios a la electricidad en regiones de temperaturas elevadas y caída del precio de algunos productos agropecuarios que habían subido mucho en quincenas pasadas.

     Por su parte, el componente subyacente de los precios, o aquella medida que excluye los cambios en productos volátiles como energéticos y agropecuarios, avanzó 0.30% quincena a quincena y subió 8.15% frente a la primera mitad de marzo de 2022.

     El desempeño de los precios subyacentes quedó por arriba de lo esperado por los analistas encuestados, quienes anticipaban un avance de 0.29% con respecto a la quincena previa y un crecimiento anual de 8.10%.

     El avance anual de la inflación subyacente desaceleró respecto del 8.21% de la segunda quincena de febrero, sin embargo, no deja de ser una preocupación.

     “Aunque, en efecto, también hubo cierta mejora en el componente subyacente, los niveles en los que se encuentra siguen estando cerca de sus máximos históricos”, resaltó Arias en su reporte.

     La parte subyacente de la dinámica de precios lleva siete meses por encima de 8%, muy alejada del objetivo de 3% de Banco de México, lo que aumenta la presión sobre no relajar su postura de cara a la decisión de la próxima semana, señaló el experto.

     La autoridad monetaria dará a conocer su siguiente decisión de política monetaria el próximo jueves, donde analistas esperan que continúe marcando récords en la tasa de referencia al aumentarla otros 25 puntos base, en línea con el último anuncio de la Reserva Federal.

     “Creemos que el resultado de hoy cimentará la señal del banco central de que podrían reducir el ritmo de alzas en su próxima reunión”, escribieron por su parte Alejandro Padilla y su equipo de Banorte Casa de Bolsa. “No obstante, no declararán victoria en su pelea contra la inflación, con un camino largo antes de que regrese a su rango objetivo”.

     Hace un año, en la primera mitad de marzo, los precios al consumidor subieron 0.48% quincena a quincena y aumentaron 7.29% anual.

     Los especialistas de Banorte también alertaron sobre los factores detrás de la mejora secuencial de la inflación, como la abrupta subida de energéticos hace un año, no obstante, también señalaron factores positivos.

     Entre ellos están la fortaleza del peso mexicano, pese a la reciente depreciación ante la mayor volatilidad en los mercados financieros, y la moderación del huevo y el pollo al evitar, hasta ahora, la propagación de la gripe aviar.

     “Seguimos preocupados por: mayores costos laborales que parecen seguir siendo traspasados a través de ajustes graduales en precios, particularmente en los servicios; y reportes de que la próxima temporada de sequía podría ser bastante severa, lo cual a su vez impactaría la oferta de alimentos”, señalaron los expertos de Banorte en su reporte.