Cofece condiciona operación Sanofi-Boehringer; empresa avala fallo

19 de dic. (Sentido Común) -- La Comisión Federal de Competencia Económica condicionó el intercambio de activos que plantearon realizar las empresas farmacéuticas Sanofi Aventis de México y Boehringer Ingelheim Internacional ante los temores que la operación podría tener un impacto negativo en los niveles de competencia en el mercado de los medicamentos para la tos en el país.

     Las empresas, como parte de un acuerdo global, están buscando intercambiar diversas unidades de negocio. Boehringer, por ejemplo, quiere ceder su área de cuidado para la salud del consumidor a nivel global a Sanofi, mientras que ésta ofrecerá, a cambio, su unidad de salud animal a su rival.

     Sin embargo, en los términos planteados por las empresas, la transacción no puede proceder en México, dijo Cofece, al condicionar la operación a que en ella no se incluyan los diversos medicamentos que comercializa hoy Boehringer en materia de jarabes para la tos con flema.

     “La operación sólo se autorizaría si las empresas aceptan las condiciones impuestas, destacando que Sanofi no adquiera los medicamentos comercializados por Boehringer bajo las marcas Bisolvon, Mucosolvan y Sekretovit en México”, dijo Cofece en el comunicado en el que dio a conocer la resolución del pleno sobre esta transacción. De lo contrario “Sanofi incrementaría la brecha que mantiene con el resto de sus competidores en términos de participación de mercado”.

     La principal preocupación de la transacción para las autoridades es la capacidad para fijar precios o restringir el abasto de ese tipo de medicamentos que daría a Sanofi.

     Sin embargo, la objeción, o el condicionamiento, que presentó Cofece no será, al parecer, motivo para que la operación se venga abajo. Al menos una de las dos empresas dijo que está en la mejor disposición de aceptar las objeciones de las autoridades para poder cerrar la transacción.

     De hecho, Boehringer había ya planteado a la Comisión las condiciones que luego adoptó en materia de la no inclusión de ciertos jarabes para la tos.

     “Estamos alineados con las autoridades de que esta era la decisión adecuada”, dijo Miguel Salazar, presidente y director general de Boehringer en México y Centroamérica, en una entrevista telefónica. “Boehringer Ingelheim propuso [la condición] antes de que la Cofece lo solicitara”.

     De ahí que el fallo de las autoridades haya dejado satisfecho al menos a una de las dos empresas que presentaron la solicitud para aprobar el intercambio de activos a la agencia reguladora.

     Sanofi cuenta con una fuerte participación en el mercado de medicinas para la tos y de ahí que tanto las empresas como Cofece reconocieran que la transacción podría afectar la competencia y los precios de esos productos en México.

     De acuerdo con Boehringer Ingelheim, el portafolio de medicamentos para la tos que tienen las dos empresas era el único que podría presentar problemas a la libre concurrencia y por ende objeciones de Cofece, como finalmente ocurrió.

     El resto de los portafolios de las dos compañías no presentaba esos riesgos, por lo que las autoridades optaron por no objetar la transacción en esos segmentos de mercado.

     Así para que la operación proceda, las dos compañías deberán aceptar por escrito las condiciones que les impuso Cofece, algo que muy probablemente sucederá ante la satisfacción que expresó el director general de Boehringer con la resolución de Cofece.

     Infosel no pudo contactar a Sanofi para conocer también su punto de vista sobre las condiciones que contempla la resolución de las autoridades que combaten las concentraciones excesivas y las prácticas monopólicos.

     El director de Boehringer agregó que Cofece aún deberá emitir una resolución sobre la venta de la unidad de salud animal de Sanofi a su compañía y espera que la Comisión emita un fallo favorable a principios del próximo año.

     En ese caso, las empresas también ofrecieron posibles condicionamientos a Cofece, en caso de que la dependencia encuentre que esa parte de la operación podría afectar la competencia en el mercado.

     “Los tiempos están ya muy próximos a cumplirse”, agregó el ejecutivo de Boehringer en la entrevista. El fallo “no debería excederse más allá del primer cuarto de 2017”.