La nueva planta estará destinada a la producción de vehículos convencionales de servicio pesado para las marcas Volvo y Mack. Foto Volvo
La nueva planta estará destinada a la producción de vehículos convencionales de servicio pesado para las marcas Volvo y Mack. Foto Volvo

11 de abr. (Axis negocios) -- Volvo Group, un fabricante de vehículos de origen sueco, planea la construcción de una nueva planta en México, la primera en el país destinada a vehículos pesados, en una decisión que parece responder a la recuperación en la demanda que dicho segmento tuvo en el último año.

     El proyecto tiene como objetivo complementar la producción que el grupo posee ya en Estados Unidos y Canadá, mercados donde comercializa sus vehículos de las marcas Volvo y Mack, al tiempo que permitirá respaldar las ventas de ésta última dentro del país y América Latina.

     “Agregar producción en México brindará eficiencias logísticas para respaldar las ventas” en las regiones señaladas por Volvo en un comunicado. “También proporciona un ecosistema maduro de suministro y producción que complementará el sistema estadounidense y aumentará la resiliencia y flexibilidad de la huella industrial del grupo en América del Norte”.

     El nuevo complejo contará con una extensión de 1.7 millones de pies cuadrados destinados a la producción de vehículos convencionales de servicio pesado para las marcas Volvo y Mack, incluida la producción y pintura de carrocerías de cabina en blanco, y su entrada en operaciones está prevista por la compañía en 2026.

     Otros detalles de la nueva planta, como la localización o el monto que se destinará, no fueron reveladas por la compañía que tiene previsto presentar sus resultados financieros y operativos del primer trimestre de 2024 el 17 de abril.

     El mercado mexicano no es del todo desconocido para Volvo, ya que cuenta con una planta en Tultitlán, Estado de México, que está enfocada a la producción de autobuses y vehículos para pasajeros. No obstante, la apuesta en el segmento de vehículos pesados de carga continuará en las plantas que posee en los estados de Pensilvania y Virginia.

     En Pensilvania, al noreste de Estados Unidos, Volvo arma el modelo LVO de Mack, mientras que la producción de Virginia, al sureste del país, está destinada al modelo NVR de Volvo.

     En los últimos cinco años, Volvo ha invertido más de 73 millones de dólares en expansión y mejoras en la planta de Pensilvania y actualmente destina 80 millones más para la producción futura. En tanto, en el complejo de NRV está completando una expansión de seis años, para lo cual destina 400 millones de dólares más, en el marco de la producción del nuevo modelo Volvo VNL.

     El interés de Volvo en fortalecer su negocio de vehículos pesados en América del Norte quedó mostrado desde inicio de este año, cuando lanzó una plataforma que serpa base para una nueva gama de modelos que apuntan a la electromovilidad y de combustión que funcionarán con hidrógeno y otros combustibles renovables.

     Durante 2023, la demanda de camiones se normalizó en comparación con 2022, gracias a que los volúmenes de transporte y las tarifas de flete descendieron luego de niveles históricamente altos.

     El negocio de vehículos pesados de Volvo representó 67% de los ingresos totales del grupo en 2023, que ascendieron a 553 mil millones de coronas suecas (51 mil 520 millones de dólares). De esa participación, 29% provino de sus operaciones en Norteamérica, de acuerdo con su reporte anual 2023.

 

*Fernanda Celis colaboró en esta historia

 

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Fecha de publicación: 11/04/2024

Etiquetas: Volvo automotriz México planta nearshoring