Las diferencias entre Estados Unidos y China están generando una fragmentación creciente del comercio global, advirtió el FMI. Foto archivo
Las diferencias entre Estados Unidos y China están generando una fragmentación creciente del comercio global, advirtió el FMI. Foto archivo

Los lazos económicos globales están cambiando en formas que no se veían desde la Guerra Fría, debido a las diferencias crecientes entre Estados Unidos y China, lo que podría beneficiar medianamente a algunas naciones pero terminaría por afectar al mundo si se profundiza, dijo Gita Gopinath, la primera subdirectora gerente del Fondo Monetario Internacional, en un evento.

     La economista dijo que naciones como México o Taiwán lograron convertirse en naciones “conectoras” que ayudaron a mitigar los efectos de la mayor restricción al comercio entre Oriente y Occidente, al recibir los flujos de inversión que se interrumpieron entre las dos mayores economías del mundo.

     “El surgimiento de estos países ‘conectores’ --quizás los más notables México y Vietnam-- puede haber ayudado a amortiguar el impacto económico global del desacoplamiento del comercio directo entre Estados Unidos y China”, dijo Gopinath, en el foro organizado por Stanford Institute for Economic Policy Research. “Pero sigue siendo una cuestión abierta si ha ayudado a diversificar las exposiciones y aumentar la resiliencia de la cadena de suministro”.

     En el caso de México, distintos analistas consideran que el proceso de relocalización de empresas que buscan acercarse a Estados Unidos, también conocido como nearshoring, ya está contribuyendo al crecimiento económico del país --aunque a un ritmo lento-- y debería tener un impacto mayor en los próximos años, a medida que se concreten las inversiones anunciadas por firmas extranjeras.

      “Los datos de inversión extranjera directa (IED) sugieren que el número de empresas manufactureras que se trasladan a México ha sido relativamente pequeño hasta ahora”, escribió Elijah Oliveros-Rosen, economista principal de Mercados Emergentes de la firma S&P Global Ratings, en un reporte. “La mayor parte de la IED ha sido de empresas que ya tenían operaciones en el país mediante la reinversión de sus ganancias”.

     Claro que una fragmentación más profunda entre los países aliados de Estados Unidos, los que son cercanos a China y los que no están alineados con ninguno de los dos, también podría tener efectos negativos para las naciones emergentes y en desarrollo, dijo Gopinath.

      “Los mercados emergentes y las economías en desarrollo dependen en gran medida de la IED de las economías avanzadas, la principal fuente de inversión mundial”, dijo la subdirectora gerente del FMI. “También se quedarían sin efectos de contagio positivos de la IED hacia las empresas locales en el caso del friendshoring o reshoring, cuando esta se reubica en países ‘amigos’ del otro bloque o en la nación de origen”.

     Para evitar una mayor reversión de la integración comercial, es necesario que se mantenga el diálogo entre Estados Unidos y China, además de un creciente papel de los países no alineados a estas dos superpotencias para mantener las cadenas de integración comercial funcionando, concluyó Gopinath.

 

 



Fecha de publicación: 08/05/2024

Etiquetas: FMI comercio China EUA nearshoring México economía