Infraestructura Energética Nova (IEnova) espera alcanzar un acuerdo con Comisión Federal de Electricidad en torno a la disputa que sostienen por pagos que debe hacerle la empresa eléctrica estatal por la construcción de dos gasoductos. Foto AP.
Infraestructura Energética Nova (IEnova) espera alcanzar un acuerdo con Comisión Federal de Electricidad en torno a la disputa que sostienen por pagos que debe hacerle la empresa eléctrica estatal por la construcción de dos gasoductos. Foto AP.

25 de jul. (Sentido Común) -- Infraestructura Energética Nova, o IEnova, una empresa especializada en la generación, distribución y almacenamiento de combustibles en México, dijo que espera alcanzar pronto un acuerdo con Comisión Federal de Electricidad (CFE), para terminar la disputa sobre los pagos que debe hacerle la empresa eléctrica estatal por dos gasoductos que edificó para proveerle gas natural.

     “Esperamos alcanzar una solución positiva en el corto plazo”, dijo Tania Ortíz Monasterio, directora general de IEnova, durante la conferencia telefónica con analistas e inversionistas para revisar los resultados de la empresa durante el segundo trimestre. “Ellos quieren alcanzar un acuerdo pronto y, desde luego, nosotros también”.

     La disputa de CFE con IEnova se da luego de la llegada al poder de un nuevo gobierno a finales del año pasado.

     A la nueva administración, encabezada por el presidente Andrés Manuel López Obrador, no le gustaron los términos bajo los cuales la empresa eléctrica estatal contrató, en el gobierno anterior, la edificación y uso de varios gasoductos, principalmente en el norte del país.

     El disgusto del gobierno tiene como origen los pagos que CFE ha hecho y debe hacer por siete gasoductos edificados por cuatro empresas, pero que, con excepción de uno, no han sido terminados. 

     Ante esto y tras algunas medidas legales que tomaron algunas de las empresas constructoras de la infraestructura de transporte para proteger sus intereses, como IEnova, CFE inició los procedimientos legales para que a través de un arbitraje internacional se pudiesen dirimir sus diferencias a fin de determinar si son válidos o no los pagos que la empresa estatal debe hacer a las empresas contratistas, aun cuando las obras no han sido entregadas.

     Las empresas --entre las que también están una filial de Grupo Carso, el conglomerado industrial del empresario más acaudalado de México, Carlos Slim; la firma canadiense especialista en edificar y administrar infraestructura de transporte de combustibles, TC Energy (antes Transcanada); y la compañía mexicana de servicios energéticos, Fermaca-- han argumentado que CFE debe hacer los pagos porque los retrasos en la entrega de los gasoductos se ha debido a causas más allá de su control, mejor conocidas como causas de fuerza mayor.

     CFE, sin embargo, no comparte el argumento de las empresas e inició hace algunas semanas el arbitraje que está contemplado en los contratos en caso de una discrepancia entre las partes sobre la interpretación de los contratos.

     Sin embargo, antes de que se inicien esos arbitrajes las empresas y CFE acordaron sentarse a negociar a fin de buscar resolver sus diferencias sin la participación de un tercero.

     Tanto Ortíz Monasterio, como el presidente del consejo de IEnova, Carlos Ruiz Sacristán, expresaron, durante la conferencia telefónica, su confianza en que alcanzarán un acuerdo en breve.

     “Definitivamente, tendremos que ver una resolución pronto, yo no veo que esto se prolongue hasta el próximo años”, dijo la directora general de la empresa.

     Los dos contratos de IEnova en disputa son el del gasoducto que va de Guaymas a El Oro, en el estado de Sonora, mejor conocido como Gasoducto Sonora; y el Gasoducto Marino, que va por el mar del sur de Texas al puerto de Tuxpan en la parte norte del estado de Veracruz.

     Esa obra la edificó IEnova en asociación con TC Energy y ya está terminada, aunque CFE no ha entregado la carta de recepción a las dos compañías por la disputa que sostiene de pagos que ha realizado en el pasado.

     En las negociaciones entre CFE y las empresas constructoras de gasoductos están participando representantes de los dos principales organismos empresariales del país, el Consejo Coordinador Empresarial (CEE) y el Consejo Mexicano de Negocios (CMN); mientras que por parte del gobierno están también participando representantes de López Obrador, quien ha dicho que espera también lograr un acuerdo.

     Ayer incluso, los líderes de CCE, Carlos Salazar, y de CMN, Antonio del Valle Perochena, tuvieron un encuentro con el presidente, quien reafirmó el interés gubernamental de que los capitales privados participen en el sector energético nacional tras la reforma legal y constitucional que tuvo lugar en 1993 y 1994 para abrir ese sector a la competencia.

     En ese sentido CCE también dijo que las negociaciones entre las partes avanzan bien.

     “Respecto a la temática de los gasoductos, después de tres mesas de conciliación entre las empresas constructoras y la CFE, existe un avance positivo, por lo que se espera tener un arreglo a corto plazo”, dijo el organismo empresarial a través de su cuenta en la red social Twitter.

     Sobre la problemática que ha enfrentado IEnova para terminar de edificar el Gasoducto Sonora, IEnova ha dicho que el atraso de es obra se debe a la oposición contra el gasoducto de un grupo de personas pertenecientes a la comunidad indígena Yaqui que habita por donde pasa la obra.

     Ese grupo incluso presentó un amparo contra IEnova por no haber llevado a cabo una consulta con la comunidad, como exige la legislación mexicana.

     Sin embargo, las autoridades judiciales rechazaron otorgar el amparo a ese grupo hace unos días ya que consideraron que la consulta se realizó de forma correcta, lo que fue una victoria importante, aunque parcial, para la empresa, que ahora esperará a ver si el grupo impugna esa resolución.

     En caso de hacerlo en los siguientes días, el conflicto legal seguirá en tribunales por tiempos que no son fáciles de precisar, aunque Ortíz Mena dijo que IEnova continuará dialogando con la comunidad a fin de destrabar las manifestaciones en contra del proyecto, independientemente del cauce de la disputa legal.

     En ese sentido, Ortíz Mena dijo que las autoridades gubernamentales están ayudando a la empresa a destrabar el conflicto para que una vez resuelto, la empresa pueda acceder al área y terminar la construcción del gasoducto.

     En caso de que eso ocurriese, IEnova estima que podría poner en operación la infraestructura en un tiempo cercano a un mes.

 


Fecha de publicación: 25/07/2019

Etiquetas: México economía gobierno energía infraestructura gasoducto IEnova