Tras reformas, Peña Nieto apuesta a aeropuerto, Metro, política social

2 de sep. (Sentido Común) -- El presidente Enrique Peña Nieto anunció, durante un mensaje en el marco de le entrega de su segundo informe de gobierno, que está listo el proyecto para edificar un nuevo aeropuerto internacional en la capital del país, así como para ampliar el sistema de transporte colectivo de la zona metropolitana y las modificaciones al principal programa de apoyo social del gobierno federal.

     Los anuncios los hizo Peña Nieto, quien dedicó la mayor parte de su discurso a resaltar los logros de su administración en los primeros casi dos años de gobierno en materia legislativa, ante dignatarios, miembros de su gabinete y empresarios, quienes acudieron a Palacio Nacional para escuchar el mensaje del presidente de México.

     Las reformas legislativas que resaltó Peña Nieto en su discuso y que no tienen precedente, por su amplitud de temás y pór haberse logrado en cerca de 18 meses, involucran las transformaciones que por años han solititado algunos analistsa que el país pueda dejar atrás años de crecimiento mediocre y una desigualdad económica y social que pone en entredicho los logros políticos y democráticos que ha tenido el país en las últimas dos décadas.

     Tras exaltar las ventajas que tendrá para el país la reforma energética, que abre esa industria a los capitales privados por primera vez en más de siete décadas; la reforma a las telecomunicaciones, que busca hacer más competida esa industria clave para el desarrollo nacional y que por décadas ha estado dominada por dos empresas; y la reforma educativa, que busca mejorar la calidad de la educación en el país a través de una evaluación de los maestros del país, entre otras reformas, Peña Nieto pasó a realizar algunos anuncios importantes que llevará a cabo su administración en los próximos cuatro años.

     El más importante de ellos fue el anuncio oficial de la construcción de un nuevo aeropuerto en la Ciudad de México. El proyecto, que se ha aplazado por décadas, requerirá una inversión de 120,000 millones de pesos, o 9,200 millones de dólares, para construir una terminal aérea que permita una mayor interconexión de México con el interior del país y con el resto del mundo.

     La terminal actual, que tiene dos pistas, pero que no pueden usarse simultáneamente por estar muy cerca una de la otra, está cerca de su nivel de saturación. Ese nivel muy probablemente se alcance pronto, sobre todo si la economía mexicana alcanza tasas de crecimiento de más de 4% en los próximos años, como muchos anticipan, por las reformas económicas, políticas y sociales aprobadas.

     Otras administraciones han intentado edificar una nueva terminal aérea pero problemas con los dueños de las tierras donde se ha buscado construir lo han impedido.

      "Será el mayor proyecto de infraestructura de los últimos años en nuestro país, e incluso uno de los más grandes del mundo", dijo Peña Nieto durante su mensaje.

     El nuevo aeropuerto contará con seis pistas para transportar a 120 millones de pasajeros, cuatro veces más la capacidad actual, adelantó el presidente, que el día de mañana realizará la presentación formal del proyecto.

      El actual Aeropuerto Internacional Benito Juárez de la Ciudad de México, o AICM, registró un tráfico de 31.5 millones de pasajeros el año pasado, de acuerdo con cifras de Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México, el órgano desconcentrado del gobierno federal responsable de la gestión del aeropuerto y que tendrá a su cargo la construcción de la nueva terminal.

     La capacidad máxima del aeropuerto actual de la Ciudad de México se estima en 32 millones de pasajeros.

     Además del crecimiento en el número de pasajeros, que ha sido de 9% en los últimos tres años, el aeropuerto no ha podido responder a la demanda de sitios de aterrizaje de aerolíneas de Europa, Asia y África.

     “La saturación actual restringe la comunicación entre las entidades del país; limita la conectividad de México con el mundo; frena el comercio y las inversiones; y genera demoras para los usuarios”, agregó Peña Nieto.

      Algunas fuentes familiarizadas con el proyecto, que fueron consultadas por la agencia Dow Jones, señalan que el nuevo aeropuerto estará ubicado cerca de las instalaciones del actual y de donde hace 12 años el presidente Vicente Fox intentó construir el nuevo aeropuerto, en terrenos de Texcoco, Estado de México.

     En ese entonces, campesinos de la localidad de San Salvador Atenco se opusieron al proyecto y a la expropiación o compra de sus tierras, el conflicto duró nueve meses, llegándose a producir actos de violencia. Debido al escalamiento del conflicto, el gobierno de Fox decidió cancelar el proyecto en agosto de 2002.

    Enrique Peña Nieto recuperó la iniciativa al iniciar su sexenio, en diciembre de 2012. El presidente ordenó los estudios necesarios para identificar la mejor alternativa. Gracias a ellos "se concluyó que el lugar idóneo es la zona contigua al aeropuerto actual”, dijo Peña Nieto.

     Las fuentes de Dow Jones señalan que en esta ocasión no deberían de presentarse los problemas que enfrentó Fox, debido a que se construirá sobre terrenos federales, y si bien cualquier expansión requerirá de cierta negociación con algunos vecinos de la zona, el gobierno está convencido que nada detendrá este nuevo proyecto.

     Con la operación del nuevo aeropuerto, que se espera comience a finales de 2018 o principios de 2019, las dos terminales del actual AICM cerrarán sus puertas. su espacio será utilizado para iniciativas de desarrollo comercial, también se instalará un parque para la ciudad, reportó Dow Jones.

De Oportunidades a Prospera

Por otro lado, el presidente Peña Nieto anunció cambios a Oportunidades, el principal programa de apoyo social del gobierno federal y que ha existido durante 17 años.

     La nueva versión de ese programa, que seguirá ofreciendo beneficios a quienes hoy apoya y de forma muy similar, se conocerá como Prospera.

     Prospera, sin embargo, busca responder a las limitaciones que se han ya detectado en Oportunidades, como es la incapacidad de ese programa para ofrecer ayuda a que sus beneficiarios, que son los mexicanos más pobres, puedan incorporarse a la vida productiva.

      “Los méritos de este programa, con 17 años de vida, han sido reconocidos internacionalmente, pero sus limitaciones son cada día más evidentes”, dijo Peña Nieto.

     El anuncio lo hizo el presidente días después de que el Banco Mundial presentara los resultados de una evaluación del programa Oportunidades. En esa evaluación encontró que no aseguraba la movilidad social ni eliminaba la posibilidad de salir permanentemente de la pobreza.

      "La proporción de mexicanos en pobreza es prácticamente la misma desde hace tres décadas”, dijo Peña Nieto.

    Oportunidades, que actualmente atiende a 6.1 millones de familias y cuenta con un presupuesto de 73,000 millones de pesos, o 5,570 millones de dólares, fue creado en 1997 por el presidente Ernesto Zedillo. Nació con el nombre Progresa. Posteriormente, durante el gobierno de Vicente Fox, cambió de nombre a Oportunidades, el cual lo mantuvo el presidente Felipe Calderón durante sus seis años de gobierno. Tanto Fox como Calderón pertenecen al Partido Acción Nacional, mientras que Zedillo y Peña Nieto son miembros del Partido Revolucionario Institucional.

     Con Progresa, Zedillo integró en un solo instrumento de política pública los apoyos en salud, educación y alimentación a los más pobres, además de que lo dirigió principalmente a las jefas de familia y no a las comunidades, como lo hacían iniciativas anteriores.

     A diferencia de Progresa, Oportunidades buscó incrementar las capacidades de las familias y salió de las zonas rurales para atender también a familias en pobreza en las zonas urbanas.

     Ahora, Prospera seguirá atendiendo a los mismos beneficiarios bajo el mismo enfoque tripartida, ofreciéndoles adicionalmente becas para estudios universitarios o técnicos superiores.

      Quien forme parte del padrón de Prospera, también tendrá prioridad dentro del Servicio Nacional de Empleo, la iniciativa del gobierno que ofrece servicios de información, vinculación y orientación laboral, así como proveer apoyos de tipo económico, de capacitación y de movilidad laboral.

       Prospera buscará mejorar el acceso de las familias más pobres a educación financiera, ahorro, seguros y créditos. Tendrán acceso prioritario a 15 programas productivos como: el Fondo Nacional Emprendedor, el Programa Bécate, Pro Agro Productivo y el Programa para el Mejoramiento de la Producción y Productividad Indígena.

Ampliación del metro

El tercer anuncio del presidente fue la ampliación en 20% --43.5 kilómetros-- del Sistema de Transporte Colectivo Metro de la Zona Metropolitana de la Ciudad de México.

     Las ampliaciones a este sistema las realizarán en conjunto los gobiernos del Estado de México y del Distrito Federal. Los planes son: extender la línea 4 del Metro de Martín Carrera, en el Distrito Federal, a Ecatepec, un municipio del Estado de México; mientras que la línea A se extenderá de La Paz a Chalco, territorios dentro del Estado de México.

     Como complemento a otra obra de infraestructura, como es la construcción de un tren de pasajeros que conectará al Distrito Federal con Toluca, capital del Estado de México, Peña Nieto anunció que las líneas del Metro que hoy culminan en las estaciones de Tacubaya y Mixcoac, se extenderán para conectarse con la estación Observatorio, que será el punto de destino o partida de la nueva ruta ferroviaria D.F.-Toluca, que se espera comience a operar en el segundo semestre de 2017.

    El presidente no dio mayores detalles sobre el monto de inversión que el gobierno requerirá para la realización de estas ampliaciones y de las aportaciones que recibirán éstas ampliaciones de gobierno del Distrito Federal y del Estado de México cuando el trazado de las ampliaciones así lo exija.

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