Producción industrial en México sube 0.2% en julio, crece 1.3% anual

Las actividades industriales en el país iniciaron el segundo semestre del año con una nota positiva, impulsadas por los sectores de las manufacturas y de la construcción, así como una mayor producción de servicios públicos, que opacaron el decepcionante desempeño de la producción minera.

     La producción industrial en México aumentó 0.2% en julio frente a junio, en términos ajustados por estacionalidad, su segunda alza mensual seguida después de haberse mantenido sin cambios en mayo, reportó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía.

     Las actividades industriales en el país, además, crecieron 1.3% con respecto a julio del año pasado, medido en cifras sin ajuste por temporalidad, con lo que sumó cuatro meses seguidos con alzas anuales, agregó Inegi, como también se conoce al organismo encargado de recabar las cifras económicas y sociales del país.

     La última ocasión en que el sector industrial mexicano registró una caída anual fue en marzo de este año, cuando descendió 3.7% contra el mismo mes de 2017.

     Los economistas consultados por Infosel, esperaban un incremento desestacionalizado de 0.2% para la producción industrial de México en julio, mientras que anticipaban un crecimiento de 0.9% contra julio del año pasado.

     Además, hace un año, en julio de 2017 la producción industrial tropezó 0.4% mes a mes, mientras que registró una variación anual a la baja de 0.5%, de acuerdo con datos de Inegi.

     En términos desagregados y ajustados por estacionalidad, la construcción subió 1.4% en julio frente a junio y la generación de servicios públicos como suministro de agua, gas por ductos o energía eléctrica, avanzó 1.2%.

     Por su parte, mes a mes la producción manufacturera en el séptimo mes del año se mantuvo sin cambios contra junio, a la vez que el sector de la minería registró una variación a la baja de 1.1%.

     Además, en términos anuales, el sector de la construcción subió 4.5% y la producción de servicios públicos ascendió 4.1% con respecto a julio de 2017, mientras que las manufacturas avanzaron 2.4%.

     La minería, sin embargo, se desplomó 7% durante el mismo periodo. Este sector sigue afectado por la debilidad de la producción de petróleo, que sigue a la baja pese a la reciente recuperación de los precios internacionales del barril.

     “La debilidad del sector minero arrastró una vez más la producción industrial general”, escribió Edward Glossop, economista para Latinoamérica de la consultoría británica Capital Economics, en un reporte. “Aunque los precios del petróleo han venido al alza desde principios de 2016, la producción de crudo sigue descendiendo”.

     Sin embargo, la recuperación de la construcción y el avance de las exportaciones manufactureras, así como una mayor estabilidad en la producción de servicios públicos, sugieren que el sector industrial mexicano podría tener un mejor desempeño en la segunda mitad del año frente al primer semestre.

     “Los datos de hoy ofrecen una señal temprana de que la contracción del sector industrial en el segundo trimestre será revertida en el tercero”, agregó Glossop en su reporte.

     Además, otro factor que afectaba al desempeño del sector industrial era la incertidumbre sobre el futuro de las relaciones económicas de México con Estados Unidos, el mercado que adquiere alrededor de 80% de las exportaciones nacionales.

     No obstante, esa inquietud puede desvanecerse luego que el mes pasado los gobiernos de los dos países llegaron a un entendimiento para modernizar las reglas del comercio en la región.

     Ahora, ambos países esperan incorporar a Canadá en ese nuevo acuerdo, pero con independencia de esa negociación, los inversionistas en México ya tienen un panorama más claro de la forma en que se regirán las importaciones y las exportaciones con su principal socio comercial, que es además el primer mercado para sus productos manufactureros.

     De ahí que la modernización del Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), para algunos analistas, es otro punto favorable para pensar en una mejoría de las actividades industriales.

     “El principio de acuerdo entre Estados Unidos y México sobre el TLCAN sugiere que ambos sectores seguirán interrelacionados, por lo que el mejor dinamismo de la economía estadounidense seguirá apoyando el crecimiento del sector industrial mexicano”, escribió Joan Enric Domene, economista del banco Invex en un reporte.