El estimado de crecimiento de la economía mexicana que tienen los analistas del sector privado se torna cada vez más pesimista. Foto de AP / Ginnette Riquelme.
El estimado de crecimiento de la economía mexicana que tienen los analistas del sector privado se torna cada vez más pesimista. Foto de AP / Ginnette Riquelme.

09 de jul. (Sentido Común) -- La economía mexicana parece alejarse cada vez más de la posibilidad de lograr un crecimiento por encima de 1% este año y, por el contrario, está cada vez más cerca de entrar en una recesión técnica o virtual, dijeron los analistas de Bank of America Merrill Lynch (Bofa), uno de los mayores bancos de inversión en el mundo, en un reporte.

     De acuerdo con la metodología del National Bureau of Economics Research, o NBER, se considera que una economía está en recesión técnica cuando suma dos trimestres seguidos de contracciones en el producto interno bruto, una definición que ha servido como guía para la mayoría del mundo financiero.

     En México, el producto interno bruto bajó 0.2% en el primer trimestre del año con respecto a los tres meses previos, por lo que una caída adicional en el periodo de abril a junio implicaría que se caiga en el supuesto de una recesión.

     Incluso, al inicio de este año la economía estuvo ya coqueteando con esta posibilidad, luego de mantenerse sin variación en los tres meses finales de 2018 y tropezar entre enero y marzo.

     De ahí que, ante la debilidad observada en la actividad económica del país durante la primera mitad del año, los economistas del banco, cuya sede está en Charlotte, Carolina del Norte, dan una alta probabilidad a tener una recesión en el segundo trimestre del año.

     “Estimamos que el PIB también se contraerá en el segundo trimestre 0.4%, con respecto al trimestre anterior, lo que coloca a México en una recesión técnica (dos trimestres consecutivos en negativo)”, escribieron Carlos Capistrán y Gabriel Tenorio, economistas con esa institución financiera, en el reporte. “Pero incluso si en el segundo trimestre no es negativo sino débil, es poco probable que la economía crezca por encima de 1% este año”.

     Los analistas de Bofa, quienes ya habían recortado su estimado de crecimiento de la economía de México en este año de 2 a 1%, volvieron a realizar un ajuste a la baja, pues consideran que aún se vislumbran dificultades en el horizonte para alcanzar ese objetivo.

     Ahora, los economistas del banco estadounidense prevén que la economía mexicana crezca este año a una tasa de 0.7%, mientras que para el 2020 estiman que crecerá 1.2%.

     La visión más pesimista de Bofa radica en cinco aspectos que podrían mantener débil la economía, entre los cuales destaca en primer lugar la incertidumbre sobre el comercio por el entorno más restrictivo a nivel mundial.

     “México es una economía muy abierta y se ve afectada negativamente por un comercio mundial más débil”, agregaron los economistas de Bofa. “De hecho, una contracción en las exportaciones en el primer trimestre de 2019 fue la variable que más contribuyó a la contracción general del PIB”.

     Además, los economistas de Bofa consideran que si bien el presidente estadounidense, Donald J. Trump, no hizo efectiva su amenaza de cobrar un arancel de 5% a todos los productos de origen mexicano, es probable que la amenaza tenga un impacto negativo en la inversión.

     Por el contrario, la posible ratificación del Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá, o T-MEC, podría aminorar la incertidumbre en materia comercial.

     Otro factor que amenaza con debilitar a la economía nacional es la elevada incertidumbre sobre algunas políticas internas propuestas por el gobierno de Andrés Manuel López Obrador, así como su implementación.

     “Los miembros de la administración se contradicen entre sí. . .[lo que genera] alta incertidumbre doméstica que pesa sobre la inversión nacional y la confianza de las empresas sigue siendo baja según los estándares históricos”, agregó el estudio de Bofa. “Además, la lucha contra la corrupción tiene el potencial de aumentar la productividad, pero mientras tanto es probable que esté detrás de la desaceleración de las industrias”.

      Los economistas de esa institución también consideran que otro riesgo importante es la política que implementa México respecto a la empresa estatal Petróleos Mexicanos.

     “La caída en la producción de petróleo continúa presionando a la economía”, agregaron Capistrán y Tenorio. “La producción de petróleo ha caído un 10.8% hasta abril. Incluso si se estabiliza en los niveles actuales no será un apoyo para la economía”.

     La política fiscal del país es otro argumento para estar cautos, dijeron los especialistas, porque consideran que está ejecutando una política estricta para lograr un superávit primario de 1%.

     “La forma en que la administración está reduciendo los gastos pone en riesgo el crecimiento del PIB, ya que está extrayendo recursos de insumos de crecimiento clave, como salud e infraestructura”, dice el reporte.

     Los economistas de Bank of America recomiendan que Banco de México continúe con una postura restrictiva debido a que la prima de riesgo del país aumentó por la reciente amenaza arancelaria por parte de Estados Unidos y por la baja de la calificación crediticia del país de la agencia calificadora Fitch Ratings, el 5 de mayo.

     La posibilidad de una recesión, si bien tampoco implica mucho más allá de una señal, sí reafirma las dificultades que enfrenta el gobierno del presidente López Obrador para cumplir su promesa de crecer a una tasa promedio anual al final de su administración de 4%.

     Además, hay quienes creen que la definición de recesión del NBER no necesariamente aplica para el caso mexicano, donde las cosas van mal pero tampoco hay una crisis.

     “Si me hacen apostar con momios de 100 a uno, pues suena muy interesante, ¿no? No veo yo una recesión, yo creo que perdería la apuesta; sin embargo, 100 a uno, pues chance lo tomo, nomás por hacer un poco de interés”, dijo en tono de broma el subgobernador Jonathan Heath, en la más reciente conferencia de prensa con motivo del informe trimestral de inflación de Banco de México. “La definición de una recesión va más allá de dos trimestres consecutivos de una caída en el PIB, eso es una regla de aproximación. Realmente lo que hay que ver es si es una caída generalizada en la actividad económica, incluyendo también los mercados laborales. No estamos ahorita en una recesión, no estamos necesariamente a punto de entrar” en una.

     López Obrador ha criticado a los analistas por tener una visión pesimista sobre el crecimiento de la economía y por desestimar el aporte de la variable de la corrupción al PIB.

     Incluso, al anunciar hoy el relevo en la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, el presidente insistió en que el país va por buen rumbo en materia económica.

     “Tenemos buenas cuentas, ha aumentado la recaudación, no tenemos déficit, no ha crecido la deuda pública, lo acabo de decir y lo repito: el peso es la moneda que más se ha fortalecido en el mundo en el tiempo que llevamos en el gobierno”, dijo el presidente, en un video que publicó en su cuenta personal de Facebook. “Hay a veces incomprensión o dudas, pero nosotros tenemos que actuar con decisión y con aplomo”.

    


Fecha de publicación: 09/07/2019

Etiquetas: Banco México Banxico BOFA Economía México PIB amlo lópez obrador crecimiento económico