Nokia, el pionero del teléfono celular de los noventa, quiere derrocar a Huawei

Espoo, Finlandia, 13 de may. (Dow Jones) -- Estados Unidos y China están librando una guerra sin cuartel por la supremacía tecnológica, pero Nokia, el pionero de teléfonos celulares, está tratando de jugar en ambos bandos.

     La compañía finlandesa, que casi había desaparecido, se ha transformado en un fabricante mundial de equipos de telecomunicaciones, como antenas celulares, conmutadores telefónicos, enrutadores de internet y nuevos componentes para los sistemas inalámbricos 5G de próxima generación, y ahora es el participante del mercado número dos del mundo detrás de Huawei Technologies de China

     En Estados Unidos, el gobierno ha hecho todo excepto prohibir las ventas de Huawei por temor a que las autoridades chinas puedan manejar sus equipos para obstaculizar o espiar las comunicaciones.

     Y la administración Trump está presionando a aliados como Gran Bretaña, Alemania y Japón para que hagan lo mismo, sin grandes resultados.

     Esa es una parte de la oferta de ventas de Nokia a medida que el mundo se prepara para actualizar los sistemas inalámbricos al sistema de telecomunicaciones de quinta generación (5G), la tecnología ultrarrápida que podría permitir el advenimiento de los vehículos autoconducibles y las fábricas controladas vía internet. Su personal de ventas cuenta con proveedores de servicios inalámbricos en países en los que Estados Unidos ha intensificado su retórica en contra de China, promoviendo sus equipos como una alternativa.

     Sin sistemas 5G seguros, “los secretos comerciales esenciales caerán con esas redes: innovaciones aeronáuticas, fórmulas farmacéuticas, esquemas de automóviles eléctricos”, dijo Rajeev Suri, presidente ejecutivo de Nokia, en un discurso en febrero.

     Al mismo tiempo, mientras ayuda a Estados Unidos en su campaña contra Huawei, Nokia está tratando de acrecentar su presencia en China. En gran parte a través de una empresa conjunta con una empresa china de propiedad estatal, Nokia emplea a aproximadamente 17 mil trabajadores en la región de la Gran China, que incluye Hong Kong y Taiwán.

     Eso es aproximadamente el triple del número de sus empleados en Finlandia. En conjunto, la compañía tiene una fábrica y seis instalaciones de investigación en la región.

     “¡Queremos ser amigos de China!”, dijo Suri en una entrevista en la sede de Nokia en Espoo, una ciudad boscosa ubicada en la bahía de Helsinki. Quien colabora en el consejo de directores ejecutivos en el extranjero del primer ministro chino, que asesora al gobierno en materia de negocios.

     Suri ha dicho que su objetivo es ser el principal proveedor extranjero de China. El año pasado, el negocio de Nokia en su región de China representó aproximadamente 10% de sus ventas, dos mil 200 millones de euros (dos mil 400 millones de dólares).

     Risto Siilasmaa, el presidente de Nokia, es co-director de un consorcio bilateral de negocios que establecieron Xi Jinping, presidente de China, y Sauli Niinisto, el presidente de Finlandia.

     Durante un viaje a China en junio de 2017, Siilasmaa anunció la creación de una unidad de Nokia dedicada a ayudar a las empresas de internet chinas a expandirse en el extranjero.

     “Creo que la confianza es la base de la relación entre China y Finlandia”, dijo Siilasmaa en un discurso que pronunció en mandarín durante el viaje.

     Para jugar en ambos bandos de la división de Estados Unidos y China, Nokia está siguiendo una estrategia utilizada por Finlandia durante la Guerra Fría. La nación se alió con los países europeos al mismo tiempo que ablandaba a su vecino oriental, la Unión Soviética.

     El libro de jugadas parece estar funcionando. En julio, Nokia firmó un acuerdo por valor de hasta mil 100 millones de dólares para proporcionar equipos y servicios a China Mobile, el mayor operador de telefonía móvil del mundo por el numero de suscriptores. Tres semanas después, consiguió llegar a acuerdo de tres mil 500 millones de dólares para vender equipos y servicios 5G a T-Mobile US.

     Sin embargo, Nokia aún tiene un largo camino para ponerse a la par con Huawei, que comenzó a expandirse más allá de China hace dos décadas. Huawei encontró un punto de referencia mundial al ganarse primero el favor de las empresas de telefonía inalámbrica en países en desarrollo con equipos baratos y confiables.

     Desde entonces, Huawei ha ganado clientes en todo el oeste. Los operadores dijeron que la compañía habitualmente ofrece innovaciones de equipo meses antes que Nokia y es competitiva en cuanto a precios.

     Algunos líderes de Nokia no discuten el tema, dijeron personas familiarizadas con el liderazgo de la compañía. Huawei también ha refutado las acusaciones de Estados Unidos, diciendo que opera independientemente de Beijing.

Traducido por  Luis Felipe Cedillo

Editado por Michelle del Campo           

Copyright © 2019 Dow Jones & Company, Inc. All Rights Reserved