Confianza inversionistas vuelve a México, tasas bajan en subasta

8 de ene. (Sentido Común) -- Luego que en los últimos meses del año pasado las tasas de los instrumentos de deuda gubernamentales en México tocaron niveles no vistos en una década ante la incertidumbre que generaron algunas decisiones del presidente Andrés Manuel López Obrador, ahora esas inquietudes parecen disiparse.

     Cómo resultado de eso, el peso ha ganado terreno frente al dólar, mientras que la bolsa registra importantes ganancias en lo que va del año. Hoy el regreso de la confianza de los inversionistas se vio reflejado en una caída de las tasas de interés en la deuda gubernamental denominada en pesos.

     Así, el nuevo bono de referencia a 10 años del gobierno mexicano, que vence en mayo de 2029, registró en la subasta semanal de deuda gubernamental una caída de 0.4 puntos porcentuales en el rendimiento a vencimiento que ofrece a sus propietarios para quedar en 8.71%,  o el nivel más bajo de las últimas siete semanas, cuando el instrumentó tocó un nivel no visto desde noviembre de 2008.

     La razón de la caída es para muchos el retorno de la confianza de los inversionistas que en buena medida perdió López Obrador cuando decidió cancelar a finales de octubre del año pasado el proyecto para edificar el Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM) en lo que fue el Lago de Texcoco.

     Esa decisión, que afectó negativamente al tipo de cambio, a la valuación de las empresas cotizadas en bolsa y a las tasas de interés, parece estarse ya revirtiendo gracias al paquete económico prudente que presentó López Obrador y que aprobaron los legisladores a finales del año pasado.

     La forma como el gobierno lopezobradorista, que entro en funciones el 1 de diciembre, ha también desactivando las posibles demandas que pudo generar la cancelación del NAIM, han permitido a la nueva administración recuperar parcialmente la confianza perdida, como reflejan las ganancias reportadas en los mercados financieros mexicanos en lo que va de este año.

     “Fuimos cuestionados por la decisión del aeropuerto, perdimos mucho la confianza, y después vino como arreglo financiero la propuesta de Hacienda sobre los bonos y la fibra, y después vino el presupuesto. . . todo eso genera confianza y congruencia entre lo que se dijo en campaña y lo que se está implementando”, dijo Alfonso Romo, el jefe de oficina de la presidencia de México, en el evento anual del gobierno con sus embajadores que  organiza la Secretaría de Relaciones Exteriores.

     Sin duda, entre las principales acciones que han devuelto parte de la confianza de los inversionistas nacionales y extranjeros está la decisión de López Obrador de presentar un presupuesto para 2019 que tiene como esencia mantener finanzas públicas sanas, algo que muchos, tras la decisión del NAIM, comenzaban a dudar que ocurriera.

     Además, el actual gobierno tuvo éxito en la oferta parcial de recompra y cambio de cláusulas de los bonos que emitió un fideicomiso de la empresa estatal Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM), encargada de construir NAIM.

     Con ello, López Obrador pudo eliminar los temores a que decisiones precipitadas de su gobierno pudiesen detonar un pago anticipado de los seis mil millones de dólares de bonos que emitió el fideicomiso de GACM para financiar la construcción de NAIM

     Estas acciones sin duda han permitido que los activos denominados en pesos recobren atractivo ante los ojos de los inversionistas, algo que quedó hoy claro en la subasta de valores gubernamentales

    El bono ajustable por la inflación, mejor conocido como udibono, a 30 años, o con vencimiento en noviembre de 2046, y que el pasado 4 de diciembre alcanzó una tasa máxima desde julio de 2009, registró ahora un descenso de 0.35 puntos porcentuales en su tasa para ofrecer un rendimiento de 4.25%.

     Pero no solo los factores internos han jugado a favor de los activos mexicanos, en particular los instrumentos de deuda gubernamentales. Diversos sucesos externos, especialmente la especulación de un menor número de alzas a las tasas de interés estadounidenses este año por parte de la Reserva Federal de ese país, han también ayudado a la revaloración de las acciones y el peso, así como a la caída de las tasas de interés de los bonos gubernamentales.

     Esto así que hoy en la subasta de deuda gubernamental que realiza cada semana Banco de México, el agente financiero del gobierno federal, los Certificados de Tesorería de la Federación, o Cetes a un año también registraron una caída de 0.05 puntos porcentuales, para establecerse en 8.62%, mientras que los Cetes a seis meses ofrecieron un rendimiento de 8.50%, o 0.09 puntos por debajo del nivel ofrecido la semana pasada.

     Por su parte, el Cete a tres meses bajó 0.02 puntos porcentuales con respecto a la subasta previa, para ser vendido en 8.28%. El Cete a un mes descendió 0.06 puntos con respecto a la colocación de la semana pasada, para ofrecer un rendimiento de 8%, inferior incluso a la tasa de referencia de Banco de México de 8.25%.

     Por su parte, el bonde D a cinco años no registró cambios, por lo que mantuvo su sobretasa en 0.17%.

     Con este telón de fondo, el peso también registró hoy ganancias contra el dólar. La moneda mexicana en el mercado interbancario de 48 horas cerró en su mejor nivel en poco más de dos meses, al terminar la jornada en 19.36 pesos por dólar.

     Para algunos analistas, el retorno de la confianza podría incluso dar un respiro al banco central mexicano, de tal suerte que si las cosas marchan bien ya no sólo determinará mayores alzas a su tasa de referencia, sino que incluso podría comenzar a recortar ese indicador para la segunda mitad del año.