Chrystia Freeland, la ministra de Asuntos Exteriores de Canadá, sostuvo un encuentro en la capital estadounidense con Robert Lighthizer, el representante comercial del presidente Donald J. Trump, para tratar de reducir las tensiones comerciales que ambos países atraviesan en las últimas semanas.

     Ambos funcionarios, además, representan a sus países en el proceso para modernizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte (TLCAN), que comparten con México.

     Canadá tiene en Estados Unidos a su principal socio comercial y viceversa, pero últimamente la relación no pasa por su mejor momento luego que el presidente Trump determinó imponer aranceles a las compras de acero y aluminio de naciones aliadas, incluido el canadiense.

     En respuesta, el gobierno que encabeza el primer ministro Justin Trudeau anunció una serie de medidas recíprocas como represalia por las acciones tomadas en Washington, D.C.

     De ahí que Freeland viajó a encontrarse con Lighthizer en busca de hallar una solución que ponga fin a las diferencias recientes.

     Tras el encuentro, que duró cerca de una hora, Freeland dijo ante reporteros que Canadá no busca escalar la disputa comercial con su vecino del sur, pero tampoco retrocederá en su decisión de responder con aranceles a la imposición de tarifas al acero y al aluminio canadiense.

     “Estos son aranceles ilegales y Canadá no tiene mucha opción, más con pena que con enojo, de responder”, dijo Freeland ante medios, a la salida de la oficina de Lighthizer. “De acuerdo a la ley de Estados Unidos ese ni siquiera es un asunto comercial, es un asunto de seguridad nacional, por eso Canadá respondió como lo ha hecho”.

     La canciller canadiense también aprovechó la visita para discutir el estado de la renegociación del TLCAN y en donde, hasta ahora, no han logrado alcanzar un arreglo.

     “Acordamos realizar un impulso conjunto para el TLCAN este verano pero aún no hemos acordado nuevas fechas para negociarlo”, añadió Freeland ante reporteros.

     Los tres socios de la región norteamericana iniciaron la modernización del TLCAN, que tiene casi 25 años de vigencia, a solicitud del gobierno estadounidense.

     Hasta ahora están concluidos al menos 15 de los más de 30 capítulos que se espera contenga el nuevo acuerdo, pero la negociación quedó estancada por las diferencias que muestran los tres países en las reglas de origen para autos o la cláusula de muerte súbita (sunset clause) que obligaría a revisar y renovar el tratado cada cinco años.

     Horas antes Freeland ya había adelantado que las medidas tomadas por el gobierno de Trump son proteccionistas y afectan las leyes de comercio internacional, en un intento estadounidense de manipular esas disposiciones.

     “Los aranceles son ilegales, son proteccionismo, simple y puro”, dijo Freeland, en su discurso de aceptación del premio de la revista estadounidense Foreign Policy ayer. “No son una respuesta a injusticias de otros países que dañan la industria estadounidense, son un burdo ejemplo de los Estados Unidos manipulando las cosas, violando las reglas que ayudó a escribir”.

    

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 


Fecha de publicación: 14/06/2018

Etiquetas: Aranceles Canadá EUA Freeland Lighthizer TLCAN