Alpek con revés en Brasil, juez suspende venta dos filiales Petrobras

31 de ene. (Sentido Común) -- Alpek, el brazo petroquímico del conglomerado Alfa, tendrá que esperar o quizá hasta desistir de la compra de las compañías brasileñas Suape y Citepe, propiedad de Petroleo Brasileiro, la empresa de energía estatal de Brasil conocida como Petrobras.

     La suspensión de la venta de las petroquímicas que elaboran precursores de objetos plásticos la ordenó el Segundo Tribunal Federal de Sergipe, dijo la petrolera brasileña en un comunicado enviado a Brazilian Securities and Exchange Commission, el órgano regulador del mercado de valores brasilero, sin que detallara la razón que provocó la decisión.

     “Es correcto que comenzó un proceso legal en Brasil relacionado con la venta de Suape y Citepe”, dijo Hernán Lozano, director de relación con inversionistas de Alpek en una respuesta por correo electrónico a Infosel. “No tengo más información en este momento”, agregó el ejecutivo.

      En el escueto documento, Petrobras dijo que se defenderá legalmente contra la prohibición con el objetivo de proteger los intereses de sus accionistas.

     Aunque no está claro quién ejerció las acciones legales para frenar la venta, se tiene conocimiento de que el Sindicato dos Petroleiros de Alagoas e Sergipe (Sindipetro-ALSE), donde están agrupados los trabajadores de Petrobras, ha interpuesto acciones legales populares contra el proyecto de desinversión de Petrobras, de acuerdo con medios locales.

     Muy probablemente a falta de datos sobre la decisión judicial la acción de Alpek cerró la jornada con una caída de apenas 0.04% a 24 pesos, no muy alejado de la caída de 0.19% del índice de referencia.

      Alpek llegó a un acuerdo con Petrobras, una semana antes de que terminara 2016, para comprar la totalidad de las dos filiales productoras de poliéster por 385 millones de dólares, una transacción que fue informada a los dueños de la empresa mexicana desde finales de julio.

    Suape y Citepe, que elaboran tereftalato de polietileno (PET) y su precursor, el ácido tereftálico purificado (PTA), operan una planta integrada que produce 700 y 450 mil toneladas anuales de PTA y PET, respectivamente. Citepe, por su parte, también tiene una fábrica de filamento de poliéster texturizado con capacidad de 90 mil toneladas al año.

      La decisión judicial de hoy también se suma a una serie de golpes que ha recibido el programa de desinversión de Petrobras con el que la busca obtener recursos por más de 15 mil millones de dólares para el bienio 2015-2016 y planea recabar 46 mil 200 millones entre 2017 y 2018.

     Un antecedente se puede observar en otra orden judicial que suspendió la transacción pactada por Petrobras con la empresa australiana Karoon Gas en noviembre, que considera la venta de la totalidad de los activos del campo Bauna y 50% del campo Taratuga Verde, valuados en mil 500 millones de dólares.

      En diciembre, el Tribunal de Cuentas de Brasil, un organismo público independiente que supervisa las finanzas de todas las entidades gubernamentales de ese país, suspendió preventivamente la venta y activos de la empresa estatal por considerar que no siguió de manera adecuada la normatividad y por violar el principio de publicidad de administración pública.

    Sin embargo, como parte de esa misma decisión, el Tribunal dio luz verde a Petrobras para continuar con varios proyectos donde tenía negociaciones avanzadas, incluyendo al menos hasta ese momento la venta de activos a Alpek.