Vista Oil & Gas, la única empresa dedicada a la exploración y extracción de crudo y gas que cotiza en la Bolsa Mexicana de Valores, dijo que los países prioritarios para determinar en donde invertir son México y Argentina, aunque su estrategia para tomar una última decisión es pragmática por lo que no descarta que la decisión final de adquisición de activos petroleros pueda incluir bienes energéticos ubicados en Colombia o Brasil.

     La empresa, con sede en la Ciudad de México, cuenta con 650 millones de dólares para invertir. Esos fondos los obtuvo hace poco más de un mes tras la colocación de acciones en México y el extranjero.

     Vista se convirtió así en no sólo la primera petrolera en cotizar en el mercado accionario mexicano, sino incluso en la primera compañía en cotizar bajo el esquema de Special Purpose Acquisition Company, o Spac, que no es más que el nombre que se da un vehículo financiero que coloca títulos para obtener fondos y posteriormente utilizarlos para invertir en actividades previamente definidas.

     Dado que el objetivo de Vista es convertirse en una empresa petrolera latinoamericana con operaciones en México, Argentina, Brasil y Colombia, la compañía está revisando diversas oportunidades de inversión en esos cuatro países.

     Sin embargo, por el conocimiento que sus directivos tienen del mercado petrolero argentino (la mayoría trabajó en altos puestos dentro de la petrolera argentina YPF, donde incluso fueron los responsables de hacer rentable el yacimiento argentino Vaca Muerta, el segundo de formación de lutitas más grande en el mundo); así como el mexicano (que recientemente abrió sus puertas a los capitales privados, nacionales y extranjeros), lo más probable es que la primera inversión o inversiones que lleve a cabo la compañía sea en alguno de esos dos mercados.

     “Nuestro meta es generar un Latam champion, que tenga acceso a activos de clase mundial”, dijo Miguel Galuccio, director general de Vista en un encuentro con periodistas para celebrar la salida de la empresa a bolsa en México y el extranjero.

     Los activos que la empresa estudia son diversos e incluyen posibles mandatos de operación, o farmouts, por parte de las compañías petroleras estatales de los cuatro países en los que la empresa quiere iniciar operaciones y que por primera vez en su historia han abierto sus industrias petroleras a los capitales privados.

     “Vista se ve en Latinoamérica como un partner of choice”, o un buen socio, agregó Galuccio.

     Claro que al mismo tiempo, Vista descarta revisar activos poco importantes, como podrían ser yacimientos marginales, o aquellos que impliquen grandes retos tecnológicos o inversiones multimillonarias, como podrían ser yacimientos en aguas profundas.

     En concreto, los ejecutivos de la empresa están estudiando activos tanto en aguas someras como tierra adentro, que podrían incluso provenir de asociaciones con empresas petroleras que asignen ciertos contratos de exploración, explotación y operación, a terceros.

     El plazo que tiene la empresa para invertir los recursos que obtuvo con su colocación es de dos años. Las inversiones que realice la empresa podrían incluso contemplar la integración con actividades petroleras intermedias o midstream (almacenamiento o transporte).

     Si en ese lapso Vista no concreta alguna inversión devolverá los recursos íntegros que obtuvo, más la tasa de interés que generen durante el tiempo que hayan estado estacionados en instrumentos financieros seguros y que ofrecen como rendimiento la London Interbank Offered Rate, o Libor.

     Si eso ocurre, los únicos que perderán dinero serían el actual equipo directivo de Vista y su empresa patrocinadora, el fondo de inversión estadounidense y especializado en la industria energética, Riverstone Holding, que actualmente son quienes están financiando la operación de la compañía y son dueños de un interés de 20% en ella.

     Galuccio dijo que la empresa espera llegar a producir 100 mil barriles de crudo al día en cinco años, una meta que podría llegar a representar ingresos anuales cercanos a mil 700 millones de dólares, si los precios del crudo a nivel internacional no bajan o suben de su nivel actual de alrededor de 48 dólares el barril.

     En ese sentido, el ejecutivo está confiado que la cotización del crudo no baje en los siguientes años ya que a pesar de que existe hoy aparentemente una sobreoferta y que la demanda por productos petroleros, como es la gasolina, podría descender ante el creciente uso de otras tecnologías, en particular las que utilizan los autos híbridos y eléctricos, las inversiones en exploración y extracción se han detenido.

     Eso, para Galuccio, provocará que los precios de los energéticos en lugar de bajar, suban en el futuro.

     “La exploración en el mundo se ha detenido. Si seguimos como estamos creo que nos vamos a topar con una pared”, dijo el ejecutivo. “La matemática no da. . . es un mercado que sigue al alza”.

     Sobre los riesgos en México de que el siguiente presidente pudiese revertir las reformas que abrieron el mercado petrolero nacional a los capitales privados, Galuccio está confiando que eso no ocurrirá ya que los cambios legales que se han dado en varios países latinoamericanos tienen por origen la necesidad de esas naciones de tener energía propia, depender menos del extranjero, generar empleos y dar a sus poblaciones e industrias energías con menores costos.

     Sin la reforma, esos objetivos son inalcanzables, lo que casi garantiza que los cambios permanecerán, gane quien gane la próxima elección presidencial.

     “Cualquiera que sea el próximo gobernante se va a ver con ciertos constrains”, o restricciones para revertir lo que se ha logrado, dijo el director general de Vista.




Fecha de publicación: 18/09/2017

Etiquetas: Vista Oil & Gas Argentina México