Índice DXY en 98.5 puntos, acabaría con rally postelectoral Trump

El índice del dólar o DXY, el cual mide el valor de este frente a una cesta de monedas extranjeras, opera en niveles no vistos desde hace cuatro meses, e incluso podría extender su rumbo bajista hacia los 98.5 enteros, de acuerdo con algunos expertos.

     En este momento el índice del dólar opera en 99.0 puntos, una caída de 0.36% con respecto a su nivel previo. Su nivel mínimo intradía se registró en los 98.86 enteros, nivel no visto desde inicios de noviembre.

     Pero el golpe no sólo es para el dólar, también la bolsa neoyorquina está resintiendo que el viernes pasado se canceló en el Congreso de Estados Unidos la votación para la ley del sector salud propuesta por la administración de Donald J. Trump, que vendría a reemplazar el programa de salud que creo el expresidente Barack Obama, mejor conocido como “Obamacare”.  En tanto que los activos denominados como seguros, los Treasuries son los ganadores de esta situación.

     Desde que Donald J. Trump ganó las elecciones presidenciales del país vecino, el pasado ocho de noviembre, la alegría de los inversionistas no se hizo esperar, pues mucho se hablaba del agresivo plan fiscal que implementaría para impulsar el crecimiento económico de la mayor economía del mundo.

     Lo anterior llevó al índice que mide el valor del “billete verde” a operar en máximos de casi 14 años, cerca de los 104 puntos; la bolsa neoyorquina rompió niveles récord e incluso el Dow Jones tocó niveles por encima de los 21 mil enteros, en tanto que la tasa del bono del Tesoro estadounidense a 10 años operó en niveles no vistos desde 2014, por arriba del 2.60%.

     Pero desde el pasado lunes las cosas comenzaron ha cambiar, luego que un grupo de republicanos conservadores comenzó a mostrarse en contra de los cambios hacia el “Obamacare”, lo peor llegó el viernes cuando se confirmó la falta de apoyo en el Congreso para que Trump lograse erradicar tal programa.

     Mientras tanto, la bolsa se anotaba nuevos máximos históricos, pero el índice del dólar y la nota del Tesoro estadounidense mostraron un rumbo bajista, hecho que se consolido ante la negativa de que una de las primeras medidas prometidas por Trump (la ley del sector salud) no ha sido validada por los ojos del Congreso estadounidense.

     Lo anterior ha ocasionado que “los inversionistas se muestren más defensivos...generando dudas sobre su capacidad (de Trump) para lograr una reforma fiscal”, escribieron en un reporte analistas de Banorte Ixe.

     Tal incertidumbre ha hecho que el índice del dólar ceda terreno, con lo que las apuestas de un rumbo bajista en el corto plazo se han elevado, es así que “el siguiente piso clave está en el promedio móvil de 200 días, esta zona de soporte lo encontramos en 98.66 y 98.56 puntos”, escribió en una nota Victor Cortes, analista técnico de Banorte Ixe.

     Los analistas técnicos de Monex de igual forma coinciden en que el DXY fije una resistencia entre los 99 y 98.50 enteros.

     Por otro lado, la tasa del Treasury a 10 años opera en los mismos niveles observados a finales de febrero, en 2.3%; el Dow Jones, por su parte, se encamina a su peor racha en 6 años, al ir por su octava sesión consecutiva a la baja, de acuerdo con Market Watch.

     Tales comportamientos se deben a que el rechazo del programa al sector salud, eleva los temores de que sean los mismos republicanos, partido al cual pertenece Trump, quienes se encarguen de echar para atrás el resto de reformas que pretende el magnate, en especial la relacionada con recortes de impuestos y el aumento del gasto en infraestructura.

     “Este resultado (negación sobre ley sector salud) ha enviado la señal de que la Casa Blanca tendrá dificultad para hacer realidad su agenda de recortes a impuestos e importantes ajustes al gasto público, pues son los mismos republicanos quienes en el pasado se han opuesto a una política fiscal expansiva, incluso en periodos de recuperación económica”, comentó en un reporte Gabriella Siller, directora de análisis económico- financiero de Banco Base.

     Hasta el momento se teme que la reforma fiscal de igual forma encuentre ciertas dificultades en el Congreso e incluso podría no pasar al igual que la ley de salud, por lo que es evidente que las previsiones de mayores presiones inflacionarias se reducen, aminorando a su vez las expectativas de más incrementos de la tasa de interés del país vecino para este año.

     Este último factor es el que ha ayudado también a aligerar las presiones de la tasa del Treasury a 10 años. Mientras tanto habrá que esperar hasta agosto cuando el gobierno apruebe la reforma fiscal, tal como lo aseguró hoy el vocero de la Casa Blanca, Sean Spicer ante medios de comunicación.