En el tercer trimestre, las ganancias de las empresas estadounidenses registraron su caída anual más grande registrada desde la recesión, lo que subraya la presión competitiva de un dólar fuerte y la débil demanda global que podría limitar la capacidad de las empresas para apoyar un mayor crecimiento económico en los próximos meses.

     Una medida integral de beneficios de las empresas en Estados Unidos --las ganancias ajustadas por el inventario y la depreciación-- cayeron a 2.1 billones en el tercer trimestre, 1.1% menos con respecto al segundo trimestre, dijo el Departamento de Comercio.

     En comparación con el año anterior, las ganancias cayeron 4.7%, la mayor caída anual registrada desde el segundo trimestre de 2009. Eso marcó la segunda ocasión en que han caído las ganancias año a año desde que terminó la recesión a mediados de 2009.

     Los economistas advierten que las débiles ganancias podrían repercutir en la inversión empresarial, ejercer presión en los precios de las acciones que algunos analistas piensan parecen estar caras, y también representan un desafío para los funcionarios de la Reserva Federal que están tratando de elevar las tasas de interés después de siete años de tener tasas cercanas a cero.

     "Las ganancias se están desacelerando, no hay forma de evitar eso", dijo Joseph  LaVorgna, el economistas en jefe de Deutsche Bank. "Desafortunadamente, esas son las cosas que sugieren que estamos más allá del punto medio del ciclo económico, pero eso no significa que no podamos extender [este crecimiento] un poco más".

 



Fecha de publicación: 25/11/2015