El estímulo fiscal para la gasolina Magna pasará de 4.9 a 1.1% a partir del 25 de enero. Foto de archivo.
El estímulo fiscal para la gasolina Magna pasará de 4.9 a 1.1% a partir del 25 de enero. Foto de archivo.

Las autoridades hacendarias en México optaron por eliminar el subsidio al precio del diésel por primera vez en el año, además de disminuir por segunda semana consecutiva el que otorgan a la gasolina regular.

     La Secretaría de Hacienda y Crédito Público informó que bajó ese subsidio a la ante conocida como gasolina Magna, que es la de mayor consumo en el mercado mexicano, de 4.9 a 1.1%, lo que representa su menor nivel para los conductores que adquieren ese combustible desde que el gobierno implementó el mecanismos de subsidios, o estímulos fiscales, a algunos combustibles para evitar la variación de sus precios por arriba de la inflación.

     De igual manera, el subsidio gubernamental al precio del diésel pasó de 3.75% a cero, por lo que a partir de ahora las autoridades fiscales recabarán la totalidad del Impuesto Especial sobre Producción y Servicios (IEPS) que aplica a ese combustible y que es igual a 5.44 pesos por litro.

     En tanto, el precio de la gasolina premium permanecerá libre de subsidio por tercera ocasión consecutiva en lo que va del año.

     A raíz de estos cambios, que entrarán en vigor el sábado y permanecerán sin cambio hasta el 31 de enero, el gobierno sólo dejará de percibir cinco centavos de peso por cada litro de gasolina regular.

     En total, la Secretaría de Hacienda y Crédito Público recaudará 4.89 pesos de IEPS por cada litro de gasolina regular y 4.18 pesos por litro de gasolina premium.

     El gobierno usa un mecanismo que le permite subir o bajar el Impuesto Especial sobre Producción y Servicios, o IEPS, que cobra por cada litro de combustible automotriz, para evitar posibles variaciones bruscas de los precios que pagan los usuarios.

     Así, México puede optar por renunciar a una parte del impuesto que debería recaudar para estabilizar los precios, lo que es una especie de subsidio al precio porque renuncia a cobrar los impuestos que debería, o, si lo considera necesario, puede quitar el estímulo para recabar más impuestos a fin de mantener la salud de las finanzas públicas.

     El ajuste de los subsidios aquí responde, principalmente, al comportamiento de los precios en el mercado gasolinero del estado de Texas, Estados Unidos, la zona desde donde México importa la mayor cantidad de los combustibles que los conductores consumen en el país.

     De acuerdo con cifras de la Energy Information Administration, o el organismo que recaba la información del mercado energético estadounidense, los precios de la gasolina de bajo registraron una baja de 2.22%, mientras que los de alto octanaje tuvieron una caída de 1.06% con respecto a la última semana en esa zona de Estados Unidos.

     Esos menores precios permitieron quizás a las autoridades hacendarias a eliminar el subsidio o rebajarlo a fin de poder cobrar más impuestos sin que eso se traduzca en mayores precios por el menor costo de la materia prima en el Texas.

     En general, los precios de los combustibles registraron contracciones importantes esta semana ante el nerviosismo generado por la propagación del nuevo coronavirus en China, que podría reducir el crecimiento económico global por las restricciones a los viajes que ha impuesto el país asiático en las ciudades donde se ha detectado el nuevo padecimiento.

     Con esas medidas, China busca contener la propagación del nuevo coronavirus.

     México importa tres de cada cuatro litros de combustible que se consume en el mercado nacional, de acuerdo con cifras de la empresa estatal Petróleos Mexicanos, por lo que los precios de los combustibles tienen una alta sensibilidad a las variaciones del mercado gasolinero estadounidense.


Fecha de publicación: 24/01/2020

Etiquetas: IEPS Hacienda gasolina regular premium diésel