Nadia Milleron, madre de Samya Stumo, reacciona durante una conferencia de prensa donde los abogados de la familia anunciaron una demanda contra Boeing el jueves 4 de abril de 2019 en Chicago. Stumo murió en el accidente del 10 de marzo del avión Boeing 737 Max 8 de Ethiopian Airlines poco después del despegue. Foto AP/Noreen Nasir.
Nadia Milleron, madre de Samya Stumo, reacciona durante una conferencia de prensa donde los abogados de la familia anunciaron una demanda contra Boeing el jueves 4 de abril de 2019 en Chicago. Stumo murió en el accidente del 10 de marzo del avión Boeing 737 Max 8 de Ethiopian Airlines poco después del despegue. Foto AP/Noreen Nasir.

17 de abr. (Dow Jones) -- Los investigadores de accidentes aéreos creen que un sistema de control de vuelo automatizado que funcionó mal provocó el accidente fatal del mes pasado de un avión Boeing 737 MAX en Etiopía. No obstante, algunos pilotos, funcionarios de la industria y expertos en seguridad aérea también están planteando preguntas sobre el accionar de la tripulación de la cabina como se detalló en el informe preliminar del fatal accidente recién publicado.

     Funcionarios y ejecutivos de aviación etíopes del operador del avión, Ethiopian Airlines, dijeron que el piloto y copiloto siguieron todos los pasos que Boeing les describió para hacer frente a una falla en el sistema de prevención de caídas MCAS del avión. También se sospecha de éste sistema en otra inmersión nasal que resultó fatal de un avión 737 MAX en Indonesia de octubre pasado.

     Ambos eventos también han puesto el foco en las acciones de los pilotos para contrarrestar la activación defectuosa del MCAS. En el caso del vuelo 302 de Ethiopian Airlines, que se estrelló el 10 de marzo y en el murieron las 157 personas a bordo, el avión mantuvo una velocidad inusualmente elevada durante gran parte de su corto vuelo.

     Los pilotos también reactivaron el sospechoso sistema de prevención de caídas después de anularlo manualmente, lo que plantea preguntas del por qué lo hicieron.

     El sistema, llamado Sistema de Aumento de Funciones de Maniobra (MCAS por sus siglas en inglés), está diseñado para empujar automáticamente la nariz del avión hacia abajo, para reducir la velocidad de la nave, cuando la nave está en riesgo de caer sin control al rebasar el máximo del coeficiente de elevación en relación al ángulo de ataque de la aeronave.

     En ambos accidentes del 737 MAX, el sistema fallo, y los pilotos, luchando contra las repetidas órdenes de “nariz abajo” del sistema, perdieron el control del avión.

     Los investigadores indonesios que investigaron el accidente del Lion Air 737 MAX del año pasado destacaron los problemas de pilotaje y mantenimiento que requerían un control de seguridad, además de llamar la atención sobre el tema del MCAS.

     La alta velocidad del avión etíope dificultó más que los pilotos sacarán manualmente de su inmersión al avión de pasajeros, de acuerdo con pilotos y otros que participan o siguen de cerca la investigación. Estos expertos también cuestionan por qué los pilotos --contrario a lo indica la lista de verificación de medidas de emergencia de Boeing-- habrían vuelto a conectar un sistema que habían identificado como causante de que el avión cayera en picada en primer lugar.

     Dichas preguntas no cambian ni socavan el dilema que implican los hallazgos en los informes preliminares emitidos en ambos accidentes que apuntan a una activación errónea del MCAS debido a datos erróneos de un solo sensor.

     Boeing ha dicho estar trabajando en cambios en el programa del sistema para evitar este tipo de fallos y para facilitar que los pilotos identifiquen y respondan a un problema en el sistema. Reguladores de todo el mundo han puesto en tierra el 737 MAX en espera del certificado de seguridad de esa solución.

     Dennis Muilenburg, director ejecutivo de Boeing, dijo recientemente que “es nuestra responsabilidad eliminar este riesgo”, agregando que “se lo debemos a la gente y sabemos cómo hacerlo”. El mes pasado, la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos dijo “a medida que sepamos más sobre el accidente y los hallazgos se vuelvan disponible, tomaremos las medidas apropiadas”.

     Las preguntas sobre las acciones de los pilotos en el vuelo de Etiopía se producen ante las latentes tensiones entre los investigadores etíopes y sus homólogos estadounidenses, fricción que surgió poco después del accidente cuando ambas partes no estuvieron de acuerdo sobre dónde enviar las llamadas cajas negras del avión para su análisis.

     Ni Boeing, ni los funcionarios de la FAA, que están formalmente participando en la investigación, revisaron la versión final del informe preliminar de accidente de 33 páginas que emitieron los investigadores etíopes antes de su publicación, informaron personas en Estados Unidos enteradas sobre los detalles. El ministerio de transporte de Etiopía no respondió a las solicitudes para proporcionar sus comentarios al respecto para este artículo.

     Un portavoz de Ethiopian Airlines dijo que “el informe preliminar confirmó más allá de toda duda razonable que la tripulación siguió los procedimientos correctos según la recomendación del fabricante y la aprobación del regulador”. Agregando que “la investigación aún se encuentra en sus inicios, y hay muchas preguntas que necesitan un análisis más profundo”.

     En conjunto, la alta velocidad del avión y la reactivación del MCAS parecen haber complicado aún más los desafíos para la cabina de pilotos y, con base en pilotos y expertos en seguridad, probablemente eso les dificultó salir de su crítica situación.

     Muchas de las mismas personas agregaron que con la cascada de sonidos de advertencia, alertas y otros mensajes de emergencia, es probable que la tripulación se haya abrumado con tanta información a veces conflictiva que hubiera sido extremadamente difícil de dilucidar.

     Robert Graves, un piloto que ha volado el MAX para una importante aerolínea de Estados Unidos dijo que la alta velocidad era equivalente a un conductor que experimenta una explosión repentina en la carretera y no levanta el pie del acelerador.

     El informe, publicado recientemente, encontró que los pilotos no redujeron el empuje del motor durante el corto vuelo. Los datos extraídos de los registros de la caja negra indicaron que el avión, en su lugar, aceleró la potencia de despegue, a pesar de los problemas con el sistema de control de vuelo, y que éste finalmente alcanzó una velocidad muy por encima de su rango de operación normal.

     Los pilotos que han leído el informe dicen que eso es inusual. Un piloto normalmente moderaría la velocidad si enfrentara problemas como los que encontró en el vuelo 302 de Ethiopian Airlines, dijeron. El informe del accidente dijo que la tripulación no cambió la configuración de empuje una vez que el avión tomó vuelo. El avión, en unos tres minutos, alcanzó su límite de velocidad de diseño y continuó acelerando, según el informe del accidente.

     “La velocidad excesiva fue un gran problema”, ya que eso dificultó más mover los comandos manuales en las superficies de control de vuelo que están en la cola (elevadores), dijo John Cox, un piloto 737 retirado, ex investigador de accidentes aéreos y ex funcionario sindical de seguridad en Estados Unidos. “No creo que haya visto volar a un 737 tan por encima de la velocidad máxima” previsto por el fabricante, dijo.

     El piloto del vuelo 302 de Ethiopian Airlines, Yared Getachew, era joven pero había acumulado ocho mil horas de vuelo en las cabinas de la aerolínea, clasificándolo como un piloto experimentado, aunque solo 103 de sus horas habían sido en aviones 737 MAX. Sus colegas dijeron que era un capitán respetado. Su copiloto, Ahmed Nur Mohammed, era un recién llegado, ya que había completado aproximadamente 360 horas de vuelo de un avión etíope, con 56 horas detrás de los controles de un MAX.

     El portavoz de Ethiopian Airlines dijo que “la tripulación son nuestros héroes”.

Traducido por  Luis Felipe Cedillo

Editado por Michelle del Campo           

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Fecha de publicación: 17/04/2019

Etiquetas: Boeing 737 MAX Accidentes Pilotos Capacitación Simulador Vuelo Falla MCAS Coeficiente Elevación Ángulo Ataque Correlación Velocidad Aeronave