Ciudad de México, 8 de mar. (Dow Jones) -- El líder en las encuestas de la contienda presidencial de México frenaría el acelerado ritmo de inversión privada que se realiza en el recién abierto sector petrolero y de gas del país si gana las elecciones de julio, dijo un asesor clave de Andrés Manuel López Obrador.

Un gobierno encabezado por López Obrador, un nacionalista de izquierda, congelaría el proceso de subastas petroleras al menos hasta que se vean resultados “exitosos” en los primeros bloques de exploración y producción licitados en 2015, señaló la diputada Rocío Nahle, la principal asesora en cuestiones de energía del candidato y su candidata para convertirse en la secretaria de Energía en un futuro gabinete. Nahle, en una entrevista efectuada en su oficina de la cámara baja del Congreso de México, ofreció pocos detalles sobre cómo se evaluarían los resultados.

A los inversionistas les preocupa la victoria de López Obrador principalmente por su oposición a la reciente reforma energética de México, que puso fin a ocho décadas del monopolio estatal en la industria petrolera del país. Sin embargo, algunos de sus colaboradores han tratado recientemente de confirmar que los contratos existentes serán respetados.

México ha realizado ocho subastas petroleras en los últimos tres años, adjudicando 91 contratos de exploración y producción por una inversión esperada de 150 mil millones de dólares durante la vigencia de esos contratos. Pero ese frenético ritmo podría disminuir dramáticamente bajo la tutela de López Obrador, quien lidera por un promedio de 7.5 puntos porcentuales en cinco sondeos recientes previos a la votación del 1 de julio. Obrador ha hecho campaña con la promesa de detener la privatización de los activos estatales.

“No habrá nuevas subastas de petróleo hasta que evaluemos los resultados de la primera subasta”, dijo Nahle, una ingeniera química de 53 años. Se espera que los primeros barriles de petróleo de los campos subastados se produzcan en algún momento en 2019.

Nahle dijo que los contratos ya otorgados serían revisados pero no cancelados, a menos que se encuentre alguna irregularidad. “Los inversionistas pueden estar tranquilos, respetaremos la ley”.

Nahle también señaló que el partido de López Obrador buscaría reformar la ley para permitir la realización de un referéndum sobre la reforma energética de 2013.

En 2014, la Suprema Corte de la nación bloqueó un intento de celebrar un referéndum sobre la apertura del sector petrolero, la cual dictaminó que la legislación mexicana no permite la consulta pública sobre temas que afectan los presupuestos gubernamentales.

Incluso con los precios más bajos y la caída en la producción de la última década, el petróleo todavía contribuye con alrededor de 17% de los ingresos del gobierno federal de México.

Una victoria de López Obrador podría significar más incertidumbre para los inversionistas potenciales y menos inversión petrolera en México, el undécimo mayor productor mundial de crudo.

El presidente Enrique Peña Nieto convirtió la energía en la pieza central de una estrategia a largo plazo para revertir la decreciente producción de crudo de México. López Obrador, por su parte, se ha enfocado en los llamados a fortalecer la petrolera estatal Petróleos Mexicanos y pasar de un modelo basado en la exportación de petróleo crudo barato, a uno donde el gobierno tenga un papel activo en la producción de gasolina y productos petroleros más caros. Ha dicho que quiere construir dos refinerías.

“Debemos abandonar esta mentalidad perezosa que dice que no podemos producir aquí”, dijo Nahle en su modesta oficina decorada con retratos de López Obrador y los ex presidentes Benito Juárez y Lázaro Cárdenas, quien expropió la industria petrolera en 1938.

Nahle dejó la puerta abierta a nuevas subastas de petróleo bajo la administración de López Obrado,r si las recientes muestran resultados positivos, pero se mostró escéptica.

“Dudo que haya buenos resultados”, dijo Nahle, y agregó que las empresas a menudo aumentan sus costos operativos para disminuir la participación del gobierno en las ganancias. Añadiendo que las ganancias del gobierno y los volúmenes de producción deben ser “satisfactorios” y que la explotación de los recursos petroleros debe ser “razonable”, sin proporcionar más detalles al respecto.

Traducido por  Luis Felipe Cedillo

Editado por Michelle del Campo

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Fecha de publicación: 08/03/2018

Etiquetas: México Elecciones Candidato López Obrador Reforma Energética Licitación Corrupción Rocío Nahle