Sector industrial cae en septiembre, minería mayor descenso en 22 años

10 de nov. (Sentido Común) -- La producción industrial en México retrocedió en septiembre afectada por el débil momento por el que pasa la minería y por un tropiezo del sector manufacturero.

     Ambos comportamientos, que en buena medida se debieron a los huracanes y los sismos de septiembre, opacaron el buen desempeño que registró la generación y transmisión de energía eléctrica, así como la construcción y el suministro de agua y gas en el noveno mes del año.

     Así, en general, las actividades industriales bajaron 0.4% en septiembre contra agosto, de acuerdo a cifras ajustadas por estacionalidad y elaboradas por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía, la entidad encargada de recopilar las cifras económicas y sociales de México.

     El descenso es el cuarto en el año y el segundo de los últimos tres meses luego que en agosto la actividad industrial registró un avance mensual de 0.2%.

     Claro que a pesar de la caída de las actividades industriales, el descenso fue menos grave de lo que anticipaban los analistas encuestados por Infosel, quienes previeron un retroceso de 0.5% en el noveno mes del año contra el octavo.

     En términos anuales ajustados por estacionalidad, el sector industrial mexicano también registró un descenso en septiembre. En este caso de 1%, la tercera baja consecutiva, la séptimo en el año y la mayor desde septiembre de 2016 cuando declinó 1.8% contra septiembre de 2015.

     “En el caso particular de los huracanes, destacamos el impacto que tuvieron Harvey y Katia sobre la capacidad de refinación [estadounidense], por lo que Pemex [la empresa petrolera estatal] tuvo que reducir la producción petrolera, dado que los inventarios ya se encontraban en niveles máximos”, escribió Alejandro Cervantes, economista de Grupo Financiero Banorte, en un reporte. “Consideramos que la recesión de la industria minera [que incluye las actividades petroleras] continuará al menos durante el cuarto trimestre”.

     De hecho, el sector minero descendió 6.2% en términos mensuales y se desplomó 15.1% en cifras anuales en septiembre, su mayor caída en 22 años; mientras que las actividades manufactureras tropezaron 0.1% en septiembre frente a agosto, su primera caída en cuatro meses; aunque avanzaron 3.4% año a año.

     Las actividades mineras no mostraban un desempeño tan débil desde octubre de 1995 cuando descendieron 25% con respecto al mismo mes del año anterior.

     Además, el retroceso mensual del sector minero en septiembre de este año fue el mayor desde agosto de 2007, cuando la minería bajó 9.7% con respecto a julio de ese año.

     La producción minera estuvo además afectada por el sismo del 7 de septiembre en el sureste mexicano. El movimiento telúrico provocó el cierre temporal de la refinería de Pemex en Salina Cruz, Oaxaca, algo que también contribuyó al desplome minero en el noveno mes del año.

     Por su parte, la producción y distribución de servicios como energía eléctrica, agua y gas aumentó 1.8% mes a mes y mostró un incremento de 1.3% en septiembre contra el mismo mes del año pasado; mientras que la construcción subió 0.8% en cifras mensuales y se mantuvo sin cambios en términos anuales.

     Algunos analistas esperan que el impulso del sector de la construcción continúe al menos durante octubre ya que el otro sismo, el del 19 de septiembre y que azotó el centro del país, está ya generando una fuerte actividad asociada a las labores de reconstrucción.

     No obstante, en los siguientes meses, la producción industrial en general podría seguir afectada por la contracción minera y por el menor gasto público concentrado en proyectos de infraestructura, que opacarán el buen dinamismo que han mostrado las exportaciones manufactureras a lo largo de este año.

     “Esperamos una mejoría en el sector de la construcción como consecuencia de los sismos”, dijo Eugenio Alemán, economista del banco Wells Fargo, en un reporte. “Sin embargo, no es claro si ese impulso trascenderá, o si se tratará de un repunte de un solo mes, o si [la producción industrial] regresará a la tendencia negativa que hemos visto recientemente”.