29 de sep. (Sentido Común) -- La intensidad con la que se movió la tierra el pasado 19 de septiembre dejó de inmediato la impresión en muchos que la capital del país podría estar confrontando un evento catastrófico similar, o peor, al que había ocurrido ese mismo día pero hace exactamente 32 años.

Los temores de muchos de que la Ciudad de México podría revivir la tragedia que provocó el sismo de 1985, fueron rápidamente materializándose.

 Las redes sociales, a pesar de la intermitencia que sufrieron como consecuencia del movimiento telúrico y su sobre-saturación, comenzaron de inmediato a poblarse de mensajes, imágenes o videos que corroboraron los miedos de que el terremoto, de 7.1 grados de magnitud y con epicentro a sólo 100 kilómetros de distancia, había golpeado con fuerza el área metropolitana.

Frases como --“yo bien, pero varios edificios caídos”, “estuvo fuertísimo”, “ve cuántos se cayeron”-- aparecieron en chats o videos que transmitían diversas redes como WhatsApp y Twitter, principalmente.

Ante esos comentarios y frente a esas imágenes desgarradoras de edificios en ruinas, cientos de miles de capitalinos comenzaron de forma espontánea, como hace más de tres décadas, a buscar formas de asistir a quienes se encontraban entre los escombros de los edificios que habían habitado y que ahora, en cuestión de segundos, estaban derrumbados, o a quienes al regresar a su hogares, se percataban que habían perdido prácticamente todo y estaban desamparados.

Fue en esos momentos, de gran caos por la devastación del sismo en distintas partes de la ciudad aunque afortunadamente menor a la de 1985, cuando a un grupo de activistas, periodistas y programadores se les ocurrió aprovechar sus redes, sus contactos y sus conocimientos cibernéticos para crear una plataforma que permitiera, por un lado, ayudar a coordinar la asistencia y a verificar que los actos voluntarios de apoyo no sólo estuviesen bien dirigidos sino que llegasen verdaderamente a quienes lo necesitaban.

“Lo que hicimos fue darle vida a una red que siempre está ahí”, dijo Antonio Martínez, fundador del medio de comunicación digital Horizontal y uno de los creadores de la plataforma, que él y otros bautizaron como #Verificado19S. Decidimos juntarnos, “aprovechando la inteligencia colectiva, y poco a poco se fue desarrollando la plataforma”.

Esa plataforma, al final, se convirtió en una pieza clave para ordenar el gran cúmulo de información que comenzó a saturar las redes sociales y que amenazaba con reducir la efectividad de la ayuda a las víctimas.

Así, ante la reacción espontánea de ayuda de miles de mexicanos, #Verificado19S no sólo permitió mejorar la coordinación de esfuerzos para el rescate de las víctimas, sino también propició, y sigue propiciando, una mejor distribución, canalización y verificación de las donaciones que cientos de miles de personas han brindado a los damnificados del segundo gran sismo en golpear a México un 19 de septiembre.

Quizás los dos elementos claves que permitieron convertir a #Verificado19S en un referente, en materia para la ayuda del pasado sismo, fueron, por un lado, el uso que hicieron sus creadores de la tecnología y los mapas que les ofreció la empresa de búsquedas por internet, Google, y, por otro, su amplio manejo y conocimiento de las redes sociales.

En la creación de #Verificado19S participaron diversas organizaciones que son expertas en el uso de los nuevos medios digitales para esparcir temas y reflexiones, como es el caso de la organización en defensa de la libre expresión Artículo 19; el grupo a favor del uso de la bicicleta en ciudades Bicitekas; los medios de comunicación digitales Horizontal y Vice; el portal de difusión cultural Cultura Colectiva; la red de organizaciones de la sociedad civil Tu Constituyente; y la asociación para reducir la brecha digital Data Cívica, entre otras.

Así, a las pocas horas del sismo, la plataforma #Verificado19S permitía a cualquier persona conocer los lugares más afectados por el sismo y al seleccionarlos tener en la punta de sus dedos información clave de lo que ahí ocurría, como no sólo la ubicación exacta, sino también el número de personas atrapadas, lesionadas, desaparecidas y el número y tipo de especialistas requeridos.

Además, la plataforma permitía saber dónde estaban ubicados los centros de acopio, así como las necesidades de éstos en cuanto a víveres, bebidas, medicamentos, instrumentos de trabajo para remover escombros o incluso las ofertas de transporte para desplazarse entre los sitios siniestrados.

#Verificado19S también catalogó las edificaciones que se consideraban de alto, medio y bajo riesgo.

Así, en poco tiempo #Verificados19S se convirtió, gracias a su diseño amigable y a la muy amplia información que contenía su mapa, en la “plataforma más certera, más actualizada y más visitada de datos sobre el terremoto”.

Por si eso fuera poco, #Verificado19S fue además ejemplo para que surgieran plataformas similares en otras de las entidades, como Morelos y Puebla, estados que también fueron severamente golpeados por el sismo.

A más de una semana del terremoto, no es claro cuál será el futuro de la plataforma. Si bien hasta el momento la herramienta sigue siendo útil, pues muchos centros de acopio, como el ubicado cerca de la edificación que se desplomó en la calle de Álvaro Obregón, siguen operando y falta aún por verificarse muchas edificaciones, su importancia como coordinadora y verificadora ha comenzado a declinar.

Sin embargo, para Martínez, existe la posibilidad de #Verificado19 continúe aunque muy probablemente tendrá que adaptarse frente a nuevas necesidades o nuevas demandas de sus usuarios.

 

 

 


Fecha de publicación: 29/09/2017

Etiquetas: México Sismo