22 de sep. (Sentido Común) -- A un día que inicie una nueva ronda para modernizar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte, el secretario de Comercio de Estados Unidos, Wilbur Ross, volvió a culpar a ese acuerdo del alto déficit comercial que su país tiene con México y Canadá, comentarios que presagian que las conversaciones quizás no logren avanzar mucho en los temas más polémicos que enfrentan los tres países.

     Ross, que lanzó sus críticas contra el TLCAN, como mejor se conoce el acuerdo, en una entrevista para la cadena de televisión CNBC, fue además particularmente crítico con la industria automotriz, principalmente por el uso de autopartes provenientes de otras regiones y que se insertan en los vehículos producidos en Norteamérica.

“Las autopartes son más del 100% del total del déficit comercial”, dijo Ross, de 79 años de edad, en la entrevista con CNBC. “Para mí, la parte más espeluznante es que el rápido crecimiento que han tenido estas piezas viene de países fuera del TLCAN, como China o el sudeste asiático. . . La parte fundamental de un tratado de libre comercio es que debe ayudar a los países dentro de él y no a los que están afuera”.

     Las palabras de Ross confirman el planteamiento que ha sostenido el gobierno de Estado Unidos de incrementar los niveles de contenido regional que marca el TLCAN para que un producto elaborado en la región de América del Norte pueda intercambiarse sin el pago de aranceles.

     A esos niveles de contenido regional se les llama en la jerga del comercio internacional como reglas de origen.

     Si los gobiernos acuerdan elevar los contenidos regionales, entonces los bienes tendrían que tener más piezas elaboradas en la región y menos en otros países para verse beneficiados del libre comercio.

     El problema es que también elevar en demasía la regla de origen puede encarecer los productos elaborados en el país al no contar con piezas que se elaboran en otras partes del mundo a un menor costo.

Los comentarios de Ross se dieron a un día del arranque de la tercera ronda de renegociación del tratado comercial de más de 20 años de vigencia, en Ottawa, Canadá.

Donald J. Trump, el presidente de Estados Unidos, ha hecho mucho énfasis durante el inicio de su administración, o incluso durante su campaña electoral, de que el principal problema del TLCAN es que ha sido más benéfico para México y Canadá que para su país.

El presidente estadounidense usa como prueba de ello el gran déficit comercial que Estados Unidos tiene con México y en algunos sectores con Canadá.

El argumento, sin embargo, ha sido rechazado por diversos economistas, quienes señalan que los déficits o superávits comerciales de un país se deben a los niveles de ahorro e inversión de las naciones y no a los acuerdos de libre comercio.

Trump y su equipo más cercano han, sin embargo, ignorado las críticas a sus posturas sobre el comercio internacional.

Dos de los funcionarios que supervisan la renegociación del TLCAN, Ross y Robert Lighthizer, el encargado de la oficina US Trade Rrepresentative, han respaldado la postura del su jefe, el presidente estadounidense.

De ahí que muchos crean que la renegociación del TLCAN enfrentará desde esta tercera ronda fuertes discrepancias entre las partes, sobre todo porque las primeras dos rondas, que se realizaron en Estados Unidos y México, se enfocaron en llegar a acuerdos de los elementos menos polémicos.

De hecho, al parecer, los negociadores están ya muy cerca de alcanzar acuerdo en por lo menos 12 capítulos de los 22 capítulos que contenía el TLCAN original.

Claro que las reglas de origen aplicadas a industrias como la automotriz, será muy probablemente uno de los puntos donde más diferencias encuentren los tres países y que tomarán más tiempo en resolver los negociadores.

Ross recordó, en la entrevista, que una de las propuestas de Estados Unidos es incluir una cláusula que cambie las reglas de origen regional por una obligación de contenido doméstico, especialmente estadounidense.

Canadá y México “no tendrían por qué oponerse a sustituir con partes hechas en Estados Unidos las que vienen fuera del TLCAN”, dijo Ross, en la entrevista con el periodista Matthew Belvedere. “Una de las cosas que el embajador Lighthizer ha dicho que hará es promover un mayor contenido de la región TLCAN en general y, especialmente, un mayor contenido de Estados Unidos” en autopartes.

El secretario de Comercio estadounidense dijo que es importante tratar de acelerar las negociaciones para evitar que éstas se extiendan hacia el año que entra y sean eclipsadas por los procesos electorales que vivirán México y Estados Unidos.

Por otro lado, la agencia de noticias Reuters dijo que Ross dirá, en una editorial que le publicará el diario The Washington Post, ue si no se cambian las reglas de origen que actualmente rigen el TLCAN, entonces todo el esfuerzo de modernizarlo será en vano.

Claro que, al mismo tiempo, los representantes de la industria en los tres países, incluso los estadounidenses, han advertido que un cambio a las reglas de origen actuales --que ya de por las consideran rigurosas-- podría ser contraproducente incluso para los consumidores del país vecino del norte, ya que podría  elevar los precios de los vehículos.

El presidente Trump, que ordenó renegociar el TLCAN porque considerarlo injusto con la industria y los trabajadores estadounidenses, ha dicho que si la negociación no es favorable para sus intereses podrá ordenar la salida de su país del acuerdo.

No obstante, la posibilidad de una salida de Estados Unidos del acuerdo es cada vez considerada como algo menos preocupante.

“La gente está comenzando a entender que hay vida después del TLCAN. Si no hay acuerdo no sería el fin del mundo”, dijo el secretario de Relaciones Exteriores, Luis Videgaray Caso, en declaraciones reportadas por la agencia de noticias Bloomberg.

La tercera ronda de negociaciones culminará cinco días después. De acuerdo con diversas declaraciones de funcionarios de los tres países, es probable que en este encuentro puedan presentarse cuatro capítulos concluidos y se avance en otros siete en donde las posiciones de los socios están menos confrontadas.

     

Fecha de publicación: 22/09/2017

Etiquetas: EUA Ross comercio TLCAN autopartes automóviles México