12 de jul. (Sentido Común) -- El consumo interno de México, que ha sido el principal motor de la economía en los últimos dos años y medio, parece conservar cierta tracción en 2017 a pesar de que desde finales del año pasado los analistas han advertido de su inminente desaceleración.

     La desaceleración la preveían los especialistas por la incertidumbre que generó sobre el devenir económico las posturas proteccionistas y aislacionistas del presidente estadounidense Donald J. Trump.  

     Además, el alza a los precios de la gasolina y el diésel, de entre 14 y 20%, que decretó el gobierno a finales de diciembre generaron temor de que las familias mexicanas tuviesen que restringir sus gastos ante mayores desembolsos en combustibles y por el posible impacto inflacionario de esos incrementos –que de hecho si se materializó, ayudado por la fuerte depreciación que registró el peso a finales del año pasado.

     Sin embargo, algunos indicadores que dan cuenta del estado actual del consumo del país parecen indicar que si bien hay indicios de una desaceleración, el consumo ha resistido con mayor tenacidad a la esperada los efectos negativos de la llegada de Trump, del mayor costo de los combustibles y de una aceleración de la inflación.

     Para algunos, la fuerte generación de empleo que se ha dado a lo largo de este año, a niveles incluso no vistos antes, ha permitido, en parte, que los mexicanos, pese a un entorno menos favorable, mantengan, en el agregado, un buen nivel de consumo.

     “El consumo privado permanece robusto gracias al crecimiento de los empleos formales”, escribió el equipo de análisis Global Markets Research, una división del banco BBVA Bancomer, el más grande de México, en un reporte. “El desempleo está cerca de sus niveles antes de la crisis” financiera y económica de 2008-2009.

     Ayer, incluso, el Instituto Mexicano del Seguro Social, o IMSS, reportó que en el sexto mes del año la creación de empleos creció 26.3% frente al mismo mes del año anterior, lo que marcó el mejor junio desde que tiene registro esa institución.

     Ese avance del empleo es lo que para algunos explica que la Asociación de Tiendas de Autoservicio y Departamentales, o Antad, reportara que las ventas de las tiendas que han estado en operación por lo menos un año, de sus empresas agremiadas, registraran su mejor junio en cinco años al subir éstas 5.4%.

     De manera individual, las ventas mismas tiendas de WalMart de México y Centroamérica, la mayor cadena de supermercados de Latinoamérica, también subieron en el sexto mes del año al mayor ritmo desde 2009.

     De ahí que algunos especialistas consideran que al menos al cierre del primer semestre del año la desaceleración del consumo terminó por ser menor a la que muchos anticiparon a finales de 2016 o inicios de este año.

     El otro factor que para algunos explica que el consumo no haya sufrido la esperada desaceleración es el crecimiento récord que han registrado los envíos al país de los trabajadores mexicanos que radican en el extranjero este año.

     En el lapso enero-mayo las transferencias, mejor conocidas como remesas, sumaron, por ejemplo, 11 mil 532 millones de dólares, un nivel récord para los primeros cinco meses del año.

     Así, empleo y remesas son para algunos las variables claves que permiten explicar el crecimiento de las ventas en el país y por lo tanto la extensión en el tiempo del buen desempeño que ha registrado el consumo interno a lo largo ya de cerca de 30 meses.

     “Atrás de cada uno de esos empleos nuevos. . . hay una familia que a consecuencia puede consumir, que puede ahorrar”, dijo el secretario de Hacienda y Crédito Público, José Antonio Meade, en una entrevista radiofónica con el periodista Oscar Mario Beteta en una de las estaciones de la empresa Grupo Radio Fórmula. “Eso nos ha venido ayudando a que en los últimos años en esta administración veamos un consumo interno, robusto”.

     Incluso, el buen desempeño del empleo impulsó al presidente Enrique Peña Nieto a publicar un video sobre el desempeño del mercado laboral mexicano en el que presumió que en su administración la economía mexicana ha registrado la mayor creación de empleos que cualquier otro gobierno en los primeros cuatro años y medio.

     El video de Peña Nieto sobre el empleo sorprendió además porque el presidente no suele hacer comentarios de ese estilo sobre indicadores económicos del país, lo que da cuenta de su entusiasmo sobre la evolución favorable que registra el mercado laboral del país.

     “Este es sin lugar a dudas el sexenio del empleo. En cuatro años y medio de esta administración se crearon más empleos que en los seis años completos de cualquiera de las administraciones anteriores”, dijo el presidente Peña Nieto, en el mensaje difundido por la oficina de Presidencia. “Estas cifras son relevantes porque. . . el empleo se ve reflejado directamente en el bienestar de las familias”.

     Sin embargo, el panorama del consumo interno mexicano, para algunos, sigue siendo poco alentador.

     De hecho, si bien la creación de empleos sigue con ritmos de crecimiento sorprendentes, los salarios de los trabajadores no han subido a la par que los precios, por lo que el poder adquisitivo de los mexicanos ha descendido a lo largo del año.

     “Lo que vemos a partir a finales de 2016 e inicios de 2017 es que si bien el empleo general está creciendo y mantiene su ritmo alrededor de 4%, cuando vemos el empleo que es remunerado con más de cinco salarios mínimos ese ya está cayendo, ya dejó de crecer”, dijo Samuel Vázquez Herrera, economista principal de BBVA Bancomer, en una conferencia de prensa.

     Ese menor poder de compra podría reflejarse en menores compras futuras o bien en que los mexicanos gasten en un menor número de productos, la mayoría quizás de primera necesidad.

     Así, algunos estiman un mayor crecimiento en las ventas de tiendas de autoservicios, mientras que mantienen un pronóstico de desaceleración para el crecimiento de las ventas de tiendas departamentales.

     “Las familias no sólo han moderado su gasto en términos generales, sino que, al mismo tiempo, han decidido alocar éste de una manera distinta”, escribió Alejandro Saldaña, economista de Banco Ve por Más, en un reporte. Los mexicanos le otorgan “mayor preferencia a los bienes de primera necesidad (e.g., alimentos y bebidas), sobre otros menos urgentes (e.g., ropa y calzado)”.

     Otra señal de este cambio al interior del consumo podría ser la desaceleración que han registrado las ventas de automóviles en el mercado mexicano, que el mes pasado bajaron 5.3% frente a junio de 2016, su segunda caída en 38 meses y la mayor desde abril de 2014, cuando retrocedió 8%.

 

 


Fecha de publicación: 12/07/2017

Etiquetas: México consumo economía ventas ANTAD empleo IMSS