Banco de México dice podría detener alza tasas, aún ve futuro incierto

6 de jul. (Sentido Común) -- Los miembros de la junta de gobierno de Banco de México están dispuestos a detener el ciclo alcista en las tasas de interés que iniciaron hace dos años y medio ante sus pronósticos de que el crecimiento de los precios al consumidor se frenará en los próximos meses y porque las expectativas inflacionarias de los agentes económicos no muestran señales de aceleración.

     Esa postura quedó reflejada en los comentarios que vertieron los miembros de la junta de gobierno del banco central mexicano y que transcribió la institución en la minuta de la última decisión de política monetaria del organismo que tuvo lugar el mes pasado.

     “Se podría hacer una pausa en el ciclo alcista considerando que la inflación contemporánea se está comportando de manera congruente con la convergencia al objetivo”, dijeron los miembros del banco central, de acuerdo a la minuta. “Las expectativas de inflación también han tenido un desempeño favorable”.

     Además, los miembros del banco central dijeron que una eventual pausa en el ciclo contractivo de política monetaria no le restaría credibilidad a la institución ya que en los últimos años ha mostrado una postura agresiva para evitar que la inflación en el país se descontrole y que ha sido reconocida por los inversionistas y analistas.

     El banco central ha subido la tasa de referencia en cuatro puntos porcentuales desde diciembre de 2015, cuando inició los incrementos al costo del dinero luego de ubicarse en 3%, el nivel más bajo desde que Banco de México comenzó a utilizar este indicador para mostrar su postura monetaria hace ya más de nueve años.

     Ahora la tasa de referencia se ubica en 7%, un nivel que las autoridades monetarias ven congruente para que la inflación regrese a su rango objetivo de entre 2 y 4%.

     Los miembros de la junta de gobierno del banco central esperan que la desaceleración de la inflación lleve incluso ese indicador hacia su meta puntual de 3% para finales del próximo año.

     Con el alza decretada el mes pasado de un cuarto de punto porcentual por cuatro de los cinco miembros de la junta de gobierno, la tasa de referencia pasó de 6.75 a 7%, o su nivel más alto desde marzo de 2009.

     Para el subgobernador que se opuso a ese incremento, la tasa de referencia de 6.75% era ya consistente para que la inflación regresara gradualmente a su rango objetivo, aunque reconoció que la economía mexicana aún enfrenta mucha incertidumbre que podría traducirse en presiones inflacionarias más adelante.

     Ante este panorama, los miembros de la junta no descartaron movimientos de tasas adicionales al alza en el futuro para contrarrestar esos eventuales efectos perniciosos.

     El subgobernador que votó en contra de subir la tasa argumentó que era deseable que las autoridades monetarias contaran con mayores espacios de maniobra para mover las tasas de interés en caso de que algunos escenarios económicos negativos se materialicen.

     Por ello para él no era necesario en este momento subir la tasa de referencia.

     “Si bien tanto los mercados financieros, como algunos analistas, prevén una trayectoria de tasas de interés nominales decreciente en 2018, es probable que en ese periodo se observe un incremento en las primas de riesgo y en la incertidumbre asociada al proceso electoral”, dijo el funcionario, de acuerdo con la minuta, que no revela los nombres de los miembros de la junta que hacen comentarios y son rescatados en ese documento. Esto “podría dificultar la reducción en las tasas de interés cuando la inflación comience a disminuir”.

     El Instituto Central agregó que los mercados financieros esperan entre tres y cuatro recortes a la tasa de referencia de 0.25 puntos porcentuales cada uno, y que esos movimientos iniciarían en diciembre de este año o marzo de 2018, mientras que terminarían en diciembre del siguiente año.

     Esa perspectiva, sin embargo, difiere del consenso de los economistas del sector privado, quienes en las últimas encuestas del mismo Banco de México y de del banco, Citibanamex, estimaron que los recortes a la tasa de referencia comenzarán en junio del próximo año.

     Algunos de los factores que podrían afectar las decisiones de Banco de México son los movimientos de tasas de interés que dictamine la Reserva Federal en Estados Unidos o el desempeño de la inflación en el país, que en términos anuales se ubicó en 6.2% a finales de mayo.

     Mañana el Instituto Nacional de Estadística y Geografía revelará la inflación mensual y anual de junio. De acuerdo a la encuesta de Infosel, los economistas esperan que la inflación anual se ubicó en 6.34% el mes pasado.

     También la incertidumbre que generará la renegociación del Tratado de Libre Comercio de América del Norte y las elecciones presidenciales del país en 2018 podrían afectar las decisiones de política monetaria de Banco de México.

     De ahí que un miembro “agregó que todavía no está en posibilidad de evaluar con certeza el momento en el que pueda finalizar el ciclo de alzas de la tasas de interés”, de acuerdo con la minuta. “Es necesario mantener una política monetaria prudente que implique conservar los diferenciales de tasas respecto a Estados Unidos y, en caso de ser necesario, incrementarlos”.

     Algunos analistas detectaron un cambio de tono en los comentarios de los miembros del Instituto Central respecto a los vertidos en la reunión anterior ya que si bien los funcionarios del banco central aún ven riesgos inflacionarios, en general ya ven la inflación en su objetivo para finales del próximo año –algo que no había quedado claro antes.

     Incluso, algunos analistas cambiaron a la baja su pronóstico para la tasa de referencia para el cierre de este año, al notar un tono menos agresivo para contener la inflación en los comentarios rescatados por la minuta.

     “El tono del comunicado fue más neutral respecto al anterior”, escribieron Janneth Quiroz y Alessandra Ortiz, economistas de Grupo Financiero Monex, en un reporte. “Modificamos nuestro estimado para el cierre de año sobre la tasa de referencia a 7% desde 7.25%, toda vez que estimamos que la inflación convergirá al objetivo”.