27 de mar. (Dow Jones) -- Antes de aceptar realizar un servicio de transporte mediante su aplicación Uber cada día, Fasil Teka, un conductor de Seattle, primero debe escoger entre escuchar los podcasts de la compañía sobre el derecho a votar, la negociación del contrato colectivo de trabajo y las audiencias del consejo municipal.

Él y otros conductores de la ciudad han recibido mensajes de texto, invitaciones a reuniones y encuestas telefónicas de la empresa de transporte compartido Uber Technologies en un intento, que de acuerdo con la compañía, busca influir en contra de la sindicalización.

Teka no está convencido. “Uber nos está diciendo que no quieren que nos unamos a un sindicato”, dijo el hombre de 41 años, uno de los 1.5 millones de “choferes asociados” de Uber, como la compañía los llama. “Uber también nos dice que somos sus socios, pero no nos trata como tales”.

Uber se está preparando para una larga lucha en Seattle con el fin de bloquear el primer esfuerzo real de sindicalización en Estados Unidos para los conductores que se basan en aplicaciones, enfrentándolo al sindicato laboral Teamsters y al consejo ciudadano de Seattle.

Uber dice que la sindicalización amenaza la libertad de sus conductores de trabajar tanto o tan poco como deseen y, además, no es algo que sus choferes quieran.

“Continuamente buscamos utilizar la información del conductor sobre cómo mejorar su experiencia”, dijo Caleb Weaver, jefe de la política pública de Uber en el estado de Washington. “En este negocio, en su nivel más fundamental, no tendremos éxito a menos que los conductores tengan éxito”.

En una serie de podcasts, Brooke Steger, gerente general de Uber para el noroeste del Pacífico, entrevistó a los conductores sobre cómo se verían afectados por la sindicalización, concluyendo que eso no sería lo más conveniente para ellos.

“Es totalmente imposible saber cómo la ordenanza podría limitar quién puede o no conducir, cuándo se puede conducir y dónde se puede conducir, así como lo que se tendría que pagar en cuotas sindicales”, dijo Steger en un podcast.

El diferendo de Seattle es el último desafío al modelo de contratista independiente de Uber, que delega los gastos como el combustible, mantenimiento de vehículos y los seguros a los conductores, a cambio de la promesa de un flujo constante de viajeros y un horario flexible de trabajo. El modelo es una de las principales razones de la capitalización de mercado de Uber de 68 mil millones de dólares, aunque la compañía ha enfrentado una serie de demandas casi constantes que desafían la clasificación de no empleados.

Una ordenanza de Seattle aprobada en 2015 entró en vigor en enero dando a los conductores el derecho a votar para organizarse, lo que significa que unos 10 mil contratistas de Uber podrían obtener el derecho a negociar tarifas y beneficios. La disputa ha adquirido mayor urgencia en los últimos días, a medida que Teamsters busca obtener acceso a la información de contacto de los conductores de Uber y de su rival Lyft para ayudar en los esfuerzos de organización, aún con la presentación de demandas que impugnan la ordenanza, incluyendo la Cámara de Comercio de Estados Unidos y un grupo de 11 conductores respaldados por National Right to Work Committee (el Comité Nacional de Derecho al Trabajo).

Mientras tanto, Uber se ha visto afectada por las acusaciones de acoso sexual de un ex ingeniero, un demanda de Alphabet en la que alega el hurto de secretos comerciales, y la publicación de un video que muestra al director ejecutivo Travis Kalanick reprendiendo a un conductor.

La compañía dice que un sindicato podría amenazar la libertad de los conductores y ha sugerido que podría salir de Seattle si se forma un sindicato. Los que apoyan la sindicalización dicen que esto representaría salarios y condiciones de trabajo más consistentes, y que ayudaría a evitar que Uber y Lyft implementen cambios repentinos a las tarifas o que apaguen las aplicaciones de los conductores.

Traducido por  Luis Felipe Cedillo

Editado por Michelle del Campo

                                                                                    

Copyright © 2017 Dow Jones & Company, Inc. All Rights Reserved

 


Fecha de publicación: 27/03/2017

Etiquetas: Uber Sindacto Teamsters Sindicalización Seattle Washington Transporte Privado