8 de mar. (Dow Jones) -- El exceso de gasolina provocado por los conductores que ahora compran caca vez menos en las estaciones de servicio se está convirtiendo en una de las mayores amenazas para la racha al alza de un año registrada en el precio del petróleo.

El consumo de gasolina en Estados Unidos cayó el mes pasado, igualando casi un mínimo de 15 años, muestran las estimaciones gubernamentales. Éste cayó a tan sólo 8.2 millones de barriles diarios, promediados durante el período de cuatro semanas que terminó el 27 de enero.

Las ventas de enero en las gasolineras cayeron 4.4% con respecto al año anterior, de acuerdo con datos de Oil Price Information Service (Servicio de Información de Precios del Petróleo).

Eso ha llevado a una cantidad récord de gasolina excedente, dijo el mes pasado Energy Information Administration (EIA) de Estados Unidos. Los niveles de almacenamiento aumentaron hace unos días a 259 millones de barriles, el nivel más alto que se encuentra en los registros de EIA que datan de 1990.

“Para la gasolina, fue un enero pobre por donde quiera que se le vea”, dijo Tom Kloza, director de análisis global de energía de Oil Price Information Service.

Esta caída en la demanda sería diferente a cualquier otra que haya sido ajena a una recesión, dijo Goldman Sachs Group. Misma que está dejando a muchos analistas confundidos. Algunos cuestionan los datos. Otros atribuyen el declive a las tormentas y al mal clima.

Los conductores podrían sentirse marginados de las bombas de gasolina 31% más cara que hace un año, de acuerdo el EIA. Muchos analistas esperan que la demanda mejore en las próximas semanas.

El costo de la vida en Estados Unidos aumentó en enero en su mayor magnitud en cuatro años, en gran parte debido al aumento registrado en los precios de la gasolina, dijo el mes pasado el Departamento de Trabajo. Sus datos mostraron que los precios en las gasolineras crecieron 7.8% de diciembre a enero.

Es probable que estos precios deban bajar para que aumente el consumo. De lo contrario, los mercados petroleros pueden enfrentarse a consumidores preocupados por su presupuesto, lo que haría que el exceso perdure durante meses, tal vez hasta finales de la primavera o el verano cuando llegan a sus máximos.

“Eso arruina a uno todo el año, potencialmente”, dijo Sam Margolin, un analista de Cowen. “El crecimiento de la demanda parece ser el elemento más riesgoso de la ecuación petrolera en 2017, y la racha al alza y podría detenerse hasta la temporada de mayor conducción”.

Los administradores de dinero le han estado apostando al aumento de los precios del petróleo a un ritmo récord. Ellos tenían siete apuestas alcistas para cada apuesta bajista al 7 de febrero, de acuerdo con Commodity Futures Trading Commission.

Eso definitivamente pone al mercado en una posición de riesgo porque los comerciantes pueden sentirse obligados a vender rápidamente ante cualquier señal de que no esté terminanda la sobreoferta del petróleo.

Traducido por  Luis Felipe Cedillo

Editado por Michelle del Campo

                                                                                    

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Fecha de publicación: 08/03/2017

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