15 de feb. (Sentido Común) -- La inflación en Estados Unidos finalmente parece dar señales de estarse acelerando al arranque de este año, algo que podría poner mayor presión a la Reserva Federal (Fed) para apresurar el proceso de normalización de las tasas de interés en ese país.

     Los precios al consumidor avanzaron 0.6% durante enero con respecto a diciembre, un incremento que no veían en prácticamente cuatro años, de acuerdo con cifras ajustadas por estacionalidad de Bureau of Labor Statistics (BLS).

     La inflación no avanzaba a un ritmo tan fuerte desde febrero de 2013, cuando repuntó 0.6% con respecto al mes previo.

     Además, el crecimiento de los precios superó las expectativas de analistas consultados por el portal financiero Investing.com, quienes esperaban un avance mensual de 0.3%.

     El incremento de los precios se explicó por un crecimiento de 4% en el componente de energéticos, liderado por un aumento de 7.6% de los precios de las gasolinas del país con respecto al mes previo.

     Así, analistas parecen advertir que las presiones deflacionarias provenientes de los precios bajos de los combustibles, desde finales de 2014 hasta finales del año pasado, están desapareciendo.

     “Aunque las ganancias generales en el índice sugieren que la inflación continúa fortaleciéndose, la ganancia de enero parece un poco exagerada por el salto en la gasolina y los bienes básicos”, escribió Sarah House, la economista del banco estadounidense Wells Fargo, en un reporte.

     De hecho, el componente subyacente de los precios de bienes, o sin considerar las variaciones de alimentos y energéticos, creció 0.4% el primer mes del año o su mayor avance desde finales de 2009.

     En términos anuales los precios aumentaron 2.5%, en cifras sin ajuste estacional de BLS. Este resultado también superó los estimados recabados por Investing.com, que preveían un crecimiento de 2.4%.

     Analistas del banco mexicano Banorte Ixe consideran que la inflación anual se vio beneficiada de una baja base de comparación con respecto al nivel donde se encontraban los precios el primer mes del año pasado.

     “La inflación anual seguirá subiendo en los próximos dos meses, para comenzar a ceder ligeramente hacia la mitad del año”, escribieron Katia Goya y Juan Carlos García, los economistas con esa institución financiera. “Sin embargo, parte de este efecto podría mitigarse por la apreciación del dólar”.

     El índice de precios subyacentes, o aquel que elimina los precios de los productos más volátiles como alimentos o energía, avanzó 0.3% en enero con respecto a diciembre y 2.3% anual, superando en ambos casos los estimados de analistas de 0.2 y 2.1%, respectivamente.

     Cierto que Federal Open Market Committee (FOMC), como se conoce al órgano de 10 funcionarios de la Fed que decide el rumbo de las tasas, prefiere tomar sus decisiones de política monetaria con base en los precios medidos por el gasto en consumo, o PCE por sus siglas en inglés.

     “El movimiento de hoy encaja en la visión de Janet Yellen con respecto a que la inflación está subiendo gradualmente”, dijo House, la economista de Wells Fargo.

     En su comparecencia de este miércoles, Yellen repitió que la evolución de las condiciones económicas parece alentadora y podría pronto validar mayores tasas de interés en el país.

     “En las siguientes reuniones, el Comité evaluará si el empleo y la inflación continúan evolucionando en línea con las expectativas, de modo que podría ser apropiado un mayor ajuste a las tasas de interés de los fondos federales”, dijo Yellen en su comparecencia semestral ante el comité de servicios financieros de la Cámara de Representantes.

     Las palabras de la banquera y el dato de inflación hicieron repuntar las opiniones de quienes creen que pronto subirán nuevamente los tipos de interés en el país vecino del norte.

     De hecho, las apuestas a favor de un incremento de los tipos de interés en la reunión de mayo subieron de alrededor de 35% en que estaban ayer hasta 40.6% hoy, de acuerdo con datos de los futuros de las tasas estadounidenses en el mercado electrónico de Chicago Mercantile Exchange (CME).

     La mayoría piensa que FOMC acordará un nuevo apretón monetario, el tercero desde diciembre de 2015, en la reunión de junio con un 46% de probabilidad.

     Sin embargo, hay quienes creen que no debe darse por muerto un incremento de las tasas, del rango actual de 0.5-0.75% a uno de 0.75-1%, en la próxima reunión de FOMC, los días 14 y 15 de marzo.

     “La presidenta está convencida que cada reunión debe ser una opción viva y ciertamente marzo está en ese campo, donde todo puede ocurrir”, dijo Mark Cabana, estratega de tasas de interés con la institución financiera Bank of America, en una entrevista con la cadena estadounidense de televisión CNBC. “Nosotros creemos que marzo es muy pronto, por los datos que se han reportado, pero la presidenta gusta de tener ese grado de opciones”.

     Inclusive, en otro evento, Patrick Harker, el banquero central de Philadelphia, con voto este año en FOMC, dijo que espera tres incrementos a las tasas de interés en Estados Unidos durante 2017.

     Actualmente los datos del mercado de futuros de CME dicen que el mercado espera dos incrementos de tasas este año, con lo que los Fed Fund cerrarían en un rango de 1 a 1.25%.

 

 

 


Fecha de publicación: 15/02/2017

Etiquetas: EUA Fed FOMC Yellen tasas economía inflación