Newsletter
Recibe gratis un resumen diario de lo más importante en negocios.
Al suscribirte aceptas los términos y condiciones de nuestra política de privacidad.
Yuma, Arizona, 27 de may. (Dow Jones) -- Blanca Rivera, una maestra de cuarto grado, no se entusiasmó cuando escuchó que Apple proporcionaría a cada uno de sus 31 alumnos un iPad. Ella pensaba que las computadoras-tabletas únicamente "eran para jugar", y se preguntó cómo éstas iban a ayudar a aprender a sus estudiantes.
A ocho meses de iniciado el ciclo escolar, los estudiantes utilizan sus iPads para hacer presentaciones sobre los ángulos, producir videos sobre el ciclo del agua y ensamblar libros digitales acerca de las fracciones. Durante los exámenes que se realizan en las iPad, Rivera puede supervisar su progreso y detectar las preguntas que los confunden.
Cuando se da cuenta que los estudiantes están soñando despiertos, ella les envía mensajes cortos a sus iPads diciendo "¡Concéntrate!".
"Esto realmente mejora su aprendizaje y los motiva a aprender", dijo Rivera, acerca de las iPads.
La escuela de Rivera, H. L. Suverkrup Elementary, de Yuma, Arizona, forma parte de un esfuerzo innovador de Apple que tiene como meta utilizar la tecnología a fin de ayudar a equilibrar las herramientas que tienen los estudiantes ricos y pobres.
El experimento, que forma parte de una iniciativa de la administración Obama, está dirigido a superar los obstáculos que han socavado esfuerzos anteriores para hacer realidad la promesa de las computadoras-tabletas y otros dispositivos de hacer que el aprendizaje sea más agradable y eficaz.
Hay razones para dudar al respecto. La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, u OCDE, un grupo de naciones ricas, dijo recientemente que las escuelas que invierten bastante en tecnología no mostraron una mejoría notable en los resultados de las pruebas. El grupo también dijo que los estudiantes que utilizan las tabletas y las computadoras en exceso en realidad tienden a rendir menos que aquellos que las utilizan de forma moderada.
Elliot Soloway, profesor de Michigan University que estudia la tecnología en la educación, dijo que los ordenadores de los salones de clase normalmente no mejoran los resultados en las pruebas porque las escuelas no rediseñan sus planes de estudio.
"Las escuelas siempre cometen el error de comprar las computadoras primero y luego preguntar, ¿Y ahora, qué hacemos con ellas?", dijo Soloway.
Apple está tratando de cambiar eso parcialmente al brindarles un mayor apoyo a los educadores. En 114 escuelas de Estados Unidos, incluyendo ocho en Yuma, la empresa está proporcionando a cada estudiante una iPad, a los maestros iPads y computadoras MacBook y aulas con Apple TV.
En algunas escuelas, Apple también ayudó a construir redes Wi-Fi.
La compañía, que comprometió 100 millones de dólares para desarrollar un programa a nivel nacional en 2014, asigna a un empleado para que pase 17 días al año en cada escuela, capacitando profesores y ayudando a preparar lecciones. Estos empleados, todos antiguos maestros, recomiendan aplicaciones y a veces demuestran técnicas de enseñanza con iPads.
Apple se está enfocando a las escuelas que cuentan con escasos recursos tecnológicos. Yuma es una comunidad agroindustrial ubicada cerca de la frontera con México con una tasa de desempleo de 18%. El gasto por alumno en Yuma es un poco mayor que el gasto promedio nacional. Casi todos los estudiantes califican para recibir almuerzos gratis o a precio reducido.
Rivera, la maestra de cuarto grado, dijo que el vínculo de Apple con Suverkrup ayudó a disipar su escepticismo. Después de cada sesión, ella dijo, "vuelvo llena de ideas y no puedo esperar a probar algo nuevo con los niños".
Un ejecutivo de Apple patrocina cada escuela, y ayuda a superar los obstáculos. En Yuma, ese es Eddy Cue, vicepresidente de servicios y programas de internet de Apple. Cue, un descendiente de inmigrantes cubanos, dijo que sintió una conexión con los estudiantes de ahí porque la mayoría son latinos y no hablan inglés en casa.
Un apoyo empresarial de tal envergadura es algo inusual, dijo Daniel Owens, socio de Learning Accelerator, una organización sin fines lucrativos que tiene como objetivo integrar la tecnología en las aulas y que no está involucrada con el proyecto de Apple. "No habíamos visto nada como esto, anteriormente", dijo.
Apple tiene incentivos comerciales para demostrar que su tecnología funciona en las escuelas. La empresa ha perdido terreno en la educación, uno de sus puntos fuertes tradicionales. Las Chromebooks de Alphabet representaron 51% de las compras de computadoras y tabletas efectuadas por las escuelas de Estados Unidos en el tercer trimestre de 2015, en comparación con 24% de los productos de Apple, de acuerdo con la firma de investigaciones Futuresource Consulting.
Traducido por Luis Felipe Cedillo
Editado por Michelle del Campo
Copyright © 2016 Dow Jones & Company, Inc. All Rights Reserved
Fecha de publicación: 27/05/2016