29 de oct. (Sentido Común) -- Central de Corretaje (Cencor), una empresa con una larga trayectoria y experiencia en el corretaje de bonos, tipos de cambio y productos derivados, anunció que tras tres años de estudios y análisis ha decidido crear una segunda bolsa de valores en el país que permitirá ampliar y crecer los mercados financieros mexicanos.

     La empresa solicitó ya la concesión a las autoridades de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público para operar un segundo mercado de valores, que se conocerá como Bolsa Institucional de Valores (BIVA) y en la que cotizarán acciones, bonos, fibras, CKDes y los otros instrumentos financieros que son intercambiados hoy en la Bolsa Mexicana de Valores (BMV) --el hasta ahora único mercado de valores del país.  

     “Creemos que una nueva bolsa va a ser un beneficio para los intermediarios, inversionistas y para las emisoras en cuanto a las posibilidades de hacerse de capital de manera más fácil”, dijo Santiago Urquiza, presidente de Cencor, en una conferencia telefónica con periodistas.

     Para el ejecutivo las posibilidades de obtener la concesión para operar el segundo mercado de valores en México son altas por la buena recepción que han dado hasta ahora las autoridades financieras a la propuesta de Cencor.

     La empresa contempla invertir 300 millones de pesos (18 millones de dólares) en el proyecto, fondos que provendrán en parte de la misma empresa pero también de tres, cuatro o cinco inversionistas institucionales o privados que quieran sumarse al proyecto y puedan aportar no sólo capital sino también conocimiento de los mercados.

     “Buscaremos lo que se llama capital inteligente”, dijo Urquiza.

     Si los planes de Cencor se cristalizan, México se unirá a muchas otras naciones que tienen más de una bolsa de valores. En Estados Unidos, existen, por ejemplo, 11 y ya hay una solicitud para abrir la doceava. Canadá tiene cinco, mientras que Inglaterra y España cuatro.

“Catorce de las 15 economías más grandes del mundo tienen más de una bolsa de valores”, agregó el presidente de Cencor.

     La compañía de corretaje confía en que la tecnología que tendrá BIVA, junto con innovaciones en los sistemas de operar, harán atractivo este nuevo mercado para que las empresas vendan sus títulos en él.

     Además, BIVA cotizará también, como establece la ley en México, todos los valores que se intercambian en BMV, como también este mercado podrá cotizar los que se listen en BIVA.

     Para Urquiza esto es fundamental por las ventajas que ofrece a los inversionistas e intermediarios cuando los sistemas electrónicos de corretaje fallan. Con dos bolsas, el intercambio de títulos no pararía como si ocurre hoy cuando se presenta algún problema en los sistemas de la Bolsa.

De acuerdo a la empresa, la creación de un segundo mercado de valores hará que el sector financiero, en materia de corretaje, crezca a tasas de 30% en los primeros dos años por los beneficios que traerá la competencia a los múltiples jugadores e inversionistas que participan en esas actividades, desde intermediarios colocadores, hasta los mismos inversionistas institucionales o individuales, quienes contarán ahora con otra opción para realizar sus operaciones.

Si bien BIVA intercambiará muchas de las acciones que cotizan en la actual Bolsa, tendrá como misión persuadir a las medianas empresas de vender títulos o bonos en su mercado para financiar su expansión.

De acuerdo a Cencor, existen en México cerca de 6,000 empresas medianas que podrían listarse en algún mercado de valores. Si BIVA logra convencer a cierto porcentaje de esas compañías a hacerlo, el nuevo mercado de valores podría acallar las críticas de que el mercado de valores mexicanos es muy pequeño. En ocasiones, los participantes en las actividades bursátiles llaman al mercado de valores mexicano de forma burlona, aunque también cariñosa, la bolsita.

     Urquiza estima que tras haber revelado sus intenciones el plan es que BIVA pueda comenzar a operar en 12 meses --octubre de 2016.

     En cuando a los procesos de compensación y liquidación, así como de resguardo o depósito de valores, la nueva bolsa espera utilizar los servicios que ofrecen hoy las subsidiarias de la BMV para esas tareas.

     Esas filiales son Asigna, en materia de compensación y liquidación, e Indeval, en materia de resguardo y depósito.

     Si el proyecto fructifica, BIVA espera además poder colocar sus acciones en su mercado en cuatro o cinco años a fin de incrementar sus niveles de transparencia, dijo Urquiza.

 


Fecha de publicación: 29/10/2015

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