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31 de ago. (Bloomberg) -- Más de un año después de que México reescribió las leyes para dar independencia financiera a Petróleos Mexicanos para que pudiese competir con rivales como Exxon Mobil, las cosas no pintan aún bien para la empresa petrolera estatal.
Con el precio del crudo cerca de su nivel más bajo en seis años, con la producción petrolera de Pemex en declive y tras la decisión de la agencia calificadora Moody's Investors de advertir a los inversionistas que podrían bajar la su calificación crediticia, los inversionistas están ya demandando un premio mayor para tener bonos de la empresa petrolera, a lo que exigen de los bonos del gobierno mexicano.
El rendimiento extra que exigen está de hecho a su nivel más alto en seis meses, de un diferencial de 1.1 puntos porcentuales.
Eso no era lo que el presidente Enrique Peña Nieto esperaba que ocurriera cuando buscó romper el monopolio petrolero que tuvo Pemex por cerca de ocho décadas.
Lejos de hacer que resultara más fácil para Pemex asociarse con los productores más grandes del mundo y hacerse de los conocimientos para perforar en aguas profundas, la compañía enfrenta problemas para despertar interés ante la caída de 52% en los precios del crudo en el último año.
El desplome del precio del petróleo produjo una descenso de 28% en las ventas de Pemex en el primer semestre del año con relación al mismo periodo de 2014.
Mientras tanto, la producción de la petrolera sigue cayendo, alcanzando su nivel más bajo desde al menos 1990. Para colmo, la deuda total de Pemex creció a 1.3 billones de pesos (85,000 millones de dólares), la más alto desde al menos 1998.
Moody’s dijo que la semana pasada que esperaba que Pemex tuviese que endeudarse más en 2016 y 2017 para invertir en nuevos desarrollos, algo que empujará los montos de su deuda "muy por encima de los niveles históricos en un momento en que la producción se ha estancado y la rentabilidad y flujo de caja es muy débil".
En respuesta a la decisión de Moody’s de colocarla en revisión para una posible degradación crediticia, Pemex dijo la semana pasada que "la compañía ha estado trabajando en diferentes frentes para contener y reducir sus costos".
El precio del crudo sigue tambaleante a medida que las compañías petroleras estadounidenses no muestran síntomas de disminuir el exceso de oferta que persiste en el mercado, al tiempo que las refinerías se preparan para frenar las operaciones para el mantenimiento estacional anual.
Fecha de publicación: 31/08/2015