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17 de mar. (Sentido Común) -- Menos de 48 horas después que la empresa MVS Radio avisara que dio por terminada su relación contractual con la periodista Carmen Aristegui, múltiples voces lamentaron que un conflicto menor tuviese un desenlace tan desafortunado.
Comunicadores, analistas políticos y ciudadanos comunes y corrientes coincidieron en señalar que la salida del aire de Aristegui era innecesaria por una disputa sobre el uso no autorizado de la marca MVS Radio que bien pudo haberse resuelto en una negociación entre las partes y que terminó con el despido de la periodista, una de las conductoras de radio más críticas y populares en el país.
"La salida de Carmen Aristegui de MVS es un típico caso en teoría de juegos de suma negativa en la cual todos pierden", escribió Jorge Chabat, analista político y de temas de seguridad, además de catedrático del Centro de Investigación y Docencia Económica (CIDE), en la plataforma de discusión del portal Animal Político, conocida como Palenque. "Pierde MVS porque, haya sido su propósito o no, queda como una empresa que coarta la libertad de expresión, pierde Carmen Aristegui porque pierde un espacio muy importante, pierde la democracia mexicana porque se calla una voz que daba pluralidad, aunque uno no estuviera siempre de acuerdo con esa voz".
Expresiones como esta de Chabat se replicaron en el Palenque de Animal Político, en el que participan abogados, activistas e incluso otros periodistas. La mayoría incluso aceptó que Aristegui hizo un uso indebido de la marca MVS Radio, pero que la reacción de la empresa fue desmesurada, a la que la conductora también reaccionó con cierta exageración.
“Independientemente de que Carmen Aristegui debió respetar a la empresa, perdió una gran oportunidad MVS de dejar claro que está a favor de la transparencia, que es el mejor antídoto contra la corrupción”, escribió en esa plataforma el economista Juan Ignacio Gil Antón, en relación a que la conductora y su equipo vincularon la marca de la estación de radio al proyecto de difusión de documentos que pueden potencialmente probar actos de corrupción MexicoLeaks.
Claro que también el problema se centra en que MVS decidió despedir por el uso indebido de la marca, y antes que Aristegui, a los dos colaboradores de la conductora que realizaron la investigación y el reportaje que reveló un posible conflicto de interés en el seno de la familia presidencial.
En esa investigación, Aristegui y su equipo logró vincular la compra de una casa que estaba realizando la esposa del presidente Enrique Peña Nieto con una compañía contratista del gobierno federal actual y del gobierno que encabezó el primer mandatario cuando fue gobernador del Estado de México. La adquisición reveló un posible tráfico de influencias que desde entonces ha dañado la reputación del actual gobierno encabezado por Peña Nieto.
Así que el despido por parte de MVS de los colaboradores de Aristegui y después el de la misma periodista ha permitido desatar la muy extendidad capacidad suspicaz de los mexicanos, en el sentido de que la salida de la conductora de la estación de radio tiene mucho más de fondo que el solo maluso de la marca de la estación de radio.
Para la mayoría es casi imposible no pensar que el problema laboral lo hizo crecer MVS para tener un pretexto y así poder despedir a Aristegui ante las presiones que supuestamente ejerció el gobierno sobre la estación de radio para "vengarse" de la periodista por el reportaje de lo que ya se conoce popularmente en el país como el caso “Casa Blanca” (el color de la fachada de la residencia que quería comprar Angélica Rivera de la empresa Grupo Higa en la colonia Lomas de Chapultepec, una zona exclusiva de la capital del país).
Rivera ha decidido vender los derechos de compra sobre esa propiedad que le vendió Higa.
“Hay suficientes indicios y razones para establecer una relación de causalidad entre las revelaciones de la Casa Blanca de la pareja presidencial y el despido de Carmen y su equipo”, escribió Sergio Aguayo, un analista político y colaborador de Aristegui hasta antes de su salida en su programa matutino, conocido como Primera Emisión. “Es legítima la irritación de MVS por el mal uso de su marca; es irracional su reacción orientada a forzar la salida de Carmen (quisieron que renunciara, al final la despidieron)”.
De ahí que ante las sospechas que ha despertado el caso sobre una posible “mano negra” del gobierno de Peña Nieto en el despido de la conductora, la Secretaría de Gobernación publicó un comunicado en el que fijó la postura gubernamental frente al incidente.
En ese comunicado, el gobierno da a entender de que, desde su perspectiva, se trata de un caso entre particulares, la periodista y la compañía radiofónica, filial del conglomerado de medios MVS Comunicaciones. Pero además abogó porque se resuelva el conflicto para beneficio de la libertad de expresión y de la pluralidad de voces en la radio mexicana.
“Es deseable que este conflicto entre particulares se resuelva, para que la empresa de comunicación y la periodista sigan aportando contenidos de valor a la sociedad mexicana”, dijo Gobernación en su comunicado.
Las autoridades además dejaron en claro que no está dentro de su estrategia el censurar a nadie.
“El gobierno de la república ha respetado y valorado permanentemente el ejercicio crítico y profesional del periodismo, y seguirá haciéndolo con la convicción de que la pluralidad de opiniones es indispensable para el fortalecimiento de la vida democrática del país”.
La gran pregunta es si la postura oficial del gobierno, que actualmente enfrenta una severa crisis de confianza por el reporte de la Casa Blanca y por otros que ha elaborado el periódico estadounidense, The Wall Street Journal, sobre conflictos de interés similares por la compra de propiedades del mismo secretario de Hacienda y Crédito Público, Luis Videgaray, y del mismo Peña Nieto de compañías constructoras ganadoras de contratos gubernamentales, logrará eliminar las suspicacias.
Pocos creen que tendrá el efecto deseado.
“Lo desproporcionado de la reacción de MVS a uso de su marca hace aparecer este como el pretexto perfecto para deshacerse de Carmen, y la interpretación lógica es por la Casa Blanca”, escribió José Antonio Crespo, analista político y catedrático del CIDE. "Así haya sido o no. Pero más que para la propia Carmen este será un golpe mayor y más costoso para Peña (y desde luego para MVS)”.
Derechos reservados © Cartera, S.A. de C.V. 2015
Fecha de publicación: 17/03/2015
Etiquetas: México política gobierno libertad expresión laboral MVS Radio comunicaciones medios Aristegui