21 de nov. (Sentido Común) -- El Instituto Federal de Telecomunicaciones (IFT), la dependencia encargada de regular las industrias de las telecomunicaciones y radiodifusión, anunció que recibió tres propuestas de tres grupos económicos para contender en la licitación de frecuencias que permitirán crear dos nuevas cadenas de televisión abierta nacional.

     El número final de posturas que recibió IFT fue inferior al de las ocho compañías que habían manifestado su interés en participar en el proceso y que habían recibido una opinión favorable para proceder a presentar sus posturas.

     Al final, sin embargo, sólo tres de las ocho empresas optaron por entregar una postura para ganar la concesión y con ello poder construir y operar una cadena de televisión abierta nacional.

     Los motivos y los nombres de las compañías que al final desistieron de entregar una postura no fueron revelados. Algunos analistas dijeron que probablemente algunas de esas compañías optaron por no participar ante su cercanía al gobierno del presidente Enrique Peña Nieto, algo que podría generar un conflicto de interés, como el que se sospecha ocurrió con una de las empresas que conformaban el consorcio ganador del fallo de la licitación para construir y operar el tren bala México-Querétaro y que también edificó una casa para la Primera Dama.

    Peña Nieto optó por revocar el fallo de la licitación para la construcción del tren de alta velocidad, con el fin de erradicar la sospecha de un posible conflicto de interés; mientras que Angélica Rivera, su esposa de Peña Nieto, decidió vender los derechos para adquirir la casa que le construyó Grupo Higa y que estaba en proceso de pagar.

     Para algunos analistas esta circunstancia pudo provocar que algunas de las compañías interesadas en las concesiones para montar una cadena de televisión optara al final por no participar.

     "Ninguna oportunidad tenía. . . un grupo sin más peso real que su cercanía con el presidente Peña Nieto", escribió Ciro Gómez Leyva, columnista político del periódico Milenio, al analizar la lista de los tres de ocho postores oficiales que presentaron propuestas por las cadenas de televisión. "El fracaso de Grupo Mac, de la familia Maccise, es una señal para las licitaciones en puerta: ser amigo del poder político es ahora un handicap en contra". 

     Un empresario que había mostrado también interés en participar en la licitación era Germán Larrea, quien, con su familia, es dueño del grupo minero-ferroviario, Grupo México, la principal compañía minera de México. 

     Larrea incluso salió del consejo de administración de Grupo Televisa, la mayor empresa de televisión abierta en México, por el conflicto de intereses que tenía al estar interesado en pujar por una concesión y conocer los planes estratégicos de una empresa con la que, si ganaba esa concesión, competiría.

     Al final, Larrea desistió en presentar una postura.

     Por lo que se refiere a las empresas que sí entregaron sus posturas estas fueron:

    • Grupo Radio Centro es una empresa con décadas de experiencia en materia de radiodifusión al ser dueña de 15 estaciones de radio, 12 de ellas en el Distrito Federal y el resto en Monterrey, Guadalajara y Los Ángeles, California. Algunas de las estaciones radiofónicas de esta empresa, con sede en la Ciudad de México, son: Radio Red, Alfa 91.3, Radio Universal y Radio Joya. Radio Centro es propiedad de la familia Aguirre y cotiza en la Bolsa Mexicana de Valores. La empresa también cuenta con la asociación, Organización Impulsora de Radio, o OIR, que provee programación y actúa como representante de ventas de más de 100 estaciones afiliadas en el país.
    • Cadena Tres, una compañía propietaria de un canal de televisión y que es parte de la empresa de medios de comunicación, Grupo Imagen, que es a su vez una filial del grupo industrial, Grupo Empresarial Ángeles. Esta empresa es propietaria de 41 hoteles, 28 unidades hospitalarias, 20 estaciones de radio, del periódico impreso Excélsior con su canal de televisión, Excélsior TV, de la empresa financiera Grupo Financiero Multiva que tiene un banco, una casa de bolsa y una aseguradora, y de diversos sitios de internet a través de la empresa InventMx. Grupo Empresarial Ángeles es propiedad de Olegario Vázquez Raña y su hijo Olegario Vázquez Aldir.
    • Centro Nacional de Estudios Tepeyac una empresa propiedad de Mario Vázquez Raña, hermano de Olegario y tío de Vázquez Aldir, quien es dueño de la cadena de periódicos Organización Editorial Mexicana, que imprime los diarios El Sol de México de distintas ciudades del país, Esto un periódico deportivo y La Prensa, un diario popular. Los periódicos de OEM, como mejor se conoce a la casa editorial, se publican en 24 ciudades de las 32 entidades del país. Mario Vázquez Raña es también dueño de diversas estaciones de radio a través del grupo, ABC Radio, con 24 estaciones.

La licitación, que inició en marzo con la publicación de las bases, que fueron modificadas en septiembre, es la primera que se realiza un gobierno en México para señales de televisión abierta. Hasta ahora, las concesiones para operar canales de televisión abierta las otorgaba con total discreción el Estado.

     Con la licitación para dos cadenas de televisión, el gobierno busca terminar con esa práctica para que a través de un concurso los interesados en obtener esas concesiones compitan por ellas.

     La decisión de las autoridades por licitar dos cadenas de televisión abierta y nacional tiene el propósito de impulsar la competencia y la diversificación de contenidos en un ámbito que hasta ahora ha controlado principalmente Televisa, propiedad de Emilio Azcárraga Jean y que es considerada preponderante por las autoridades.

     Televisa, por ser calificada como perponderante, deberá compartir su red e infraestructura con sus nuevos rivales, entre otras medidas que dictaron las autoridades de IFT tras darle esa clasificación. 

     La empresa , con sus cuatro canales de televisión, dos de ellos con cobertura nacional, controla cerca de 70% de las audiencias de televisión en México y por lo tanto el mercado publicitario de ese medio masivo.

     El resto de las audiencias --30%-- la controla TV Azteca, propietaria de dos canales de televisión abierta nacional --los canales 13 y 7.

     TV Azteca, que inició operaciones comerciales en 1993 cuando el gobierno vendió su empresa de televisión estatal Imevisión al empresario Ricardo Salinas Pliego, persigue un modelo de comunicación y entretenimiento muy similar al de Televisa. 

     Esto, para muchos, ha limitado la variedad de contenidos informativos o de entretenimiento de los televidentes mexicanos. Muchos analistas han considerado, por ello, indispensable que el gobierno licite nuevos canales de televisión abierta nacionales o que revoque la concesión de algunos de los canales que tiene Televisa y TV Azteca para incrementar los niveles de competencia y la calidad de los contenidos audiovisuales y noticiosos que pueden ver los mexicanos en sus televisores.

     Claro que ante las nuevas opciones informativas y de entretenimiento que tienen los mexicanos hoy, como es la televisión restringida o bien el acceso a internet y la información digital que en se divulga a través de ese medio o bien de aplicaciones móviles, la importancia de la televisión ha caído en los últimos años.

     Esto, sin menospreciar el hecho que la televisión es aún --y por mucho-- el medio de comunicación más relevante e importante en México.

     De ahí que el gobierno, ante los reclamos de que México democratice más su industria televisiva, optara por licitar nuevos canales gracias, en lugar de quitarle los que tienen en concesión Televisa y TV Azteca, ambas con sede en la Ciudad de México.

     La decisión tiene sentido dado que la tecnología de la televisión digital, que será la única existente en el país para la transmisión de señales de televisión abierta a finales de 2015, permite contar con más canales de televisión en la banda que hoy utilizan las cadenas de televisión abierta para transmitir su señal análoga.

     Claro que aunque es probablemente que lleguen a existir en los próximos años dos canales de televisión abierta nacional, no es tampoco una garantía que los modelos de comunicación y entretenimiento cambien.

     El éxito de Televisa y TV Azteca podrían hacer demasiado arriesgado intentar seducir a los televidentes con una programación y contenidos a los que no estén familiarizados los televidentes.

     De hecho, TV Azteca, como empresa privada, inició sus operaciones con conceptos novedosos que le ganaron notoriedad y audiencias pero a medida que pasó el tiempo y que consiguió la participación de mercado esperado, la programación de la compañía se ha amalgamado mucho con el estilo de la de Televisa.

     Salinas Pliego dijo incluso al inició de la operación de TV Azteca que él no buscaría inventar el hilo negro en la industria cuando su rival había demostrado gran habilidad de negocio para hacer rentable sus canales de televisión. 

     Esta "es la primera vez en la historia del país en que se realiza un procedimiento licitatorio para adjudicarse frecuencias del espectro para la prestación del servicio de televisión abierta. De esta manera, el IFT promueve una mayor competencia en este mercado, en beneficio de los usuarios del servicio", dijo el Instituto en un comunicado.

     IFT dijo que realizará un análisis de la documentación presentada por las empresas, que debió incluir un precio mínimo por la concesión de 830 millones de pesos (61 millones de dólares). El análisis terminará entre el 5 y 9 de marzo. Las empresas que cumplan con todos los requisitos, recibirán su constancia de participación oficial y el 11 de marzo el Instituto abrirá entonces los sobres de las ofertas presentadas por los participantes.

     IFT emitirá un fallo el día 19 de ese mes.

    


Fecha de publicación: 21/11/2014

Etiquetas: México licitación concurso frecuencias televisión abierta Grupo Imagen Radio Centro Cadena Tres Tepeyac