Newsletter
Recibe gratis un resumen diario de lo más importante en negocios.
Al suscribirte aceptas los términos y condiciones de nuestra política de privacidad.
Ningún programa informático lleva tanto equipaje como Microsoft Office. Ya casi tiene 30 años, lo que en años tecnológicos es casi tan antiguo como el Himalaya. Todos los días en el trabajo, cientos de millones de personas usan las aplicaciones de Office: Word, Excel, PowerPoint, Outlook y el resto. Conocen las aplicaciones y entienden su funcionamiento interno.
¿Alguna vez has visto trabajar a un experto en Excel? Es como ver a un violinista virtuoso. Cuando Microsoft realiza cambios en Office, la compañía espera no convertir su Stradivarius en un banjo.
Quizás es por eso que Office parece tan anticuado. Si bien Google, Dropbox y otros han desarrollado herramientas de productividad modernas, colaborativas, amigables con internet y los dispositivos móviles, Microsoft se ha quedado varada en sus viejas ideas. Creó aplicaciones móviles y de internet, pero las construyó para verse y funcionar como aplicaciones de escritorio de hace una década. Microsoft parece aterrorizado de cambiar cualquier cosa y molestar a alguien.
Aun así, Office avanza lentamente hacia el futuro (o al menos hacia el presente). Microsoft anunció recientemente el mayor rediseño de Office en años, con la intención de hacer que sus aplicaciones sean más limpias, más rápidas y más colaborativas.
El cambio vendrá despacio: el nuevo aspecto está primero en Word y Outlook, pero solo para unos cuantos usuarios. Podrían pasar meses antes de que note algo diferente. El nuevo diseño parece un paso en la dirección correcta. Pero también parece demasiado pequeño, demasiado lento y tal vez sea demasiado tarde.
Menos es más
Cuando pienso en Office, una imagen siempre me viene a la mente: la barra de tareas de la parte superior de cada aplicación, repleta con todas las opciones y funciones que cualquier persona podría necesitar, bloqueando así un tercio de la pantalla.
Microsoft ha simplificado el espacio, reduciendo dicha barra a algo más pequeño y más legible. La barra ahora muestra una docena de funciones populares, relegando todo lo demás a un botón de tres puntos que está en el lado derecho. Puede incluir las funciones que desee y eliminar las que no.
Este simple cambio hace una gran diferencia. Hay más espacio para el contenido; todas las aplicaciones se ven más ligeras y más modernas. Si le encanta el amontonamiento o simplemente añoras todos esos botones, siempre puede volver al estado en el que se encontraban las cosas: sólo haga clic en la flecha del lado derecho de la barra de herramientas.
Pero en serio, no lo haga. Es mejor de esta forma. Preferiría que Microsoft vaya aún más lejos y que concentre el menú en una sola barra. Si realmente necesita la herramienta de nota al pie para su novela de mil páginas, puede buscarla.
Search (búsqueda) es una parte importante del nuevo Office. Microsoft está haciendo uso de una de las mejores funciones de Outlook Mobile, su inteligente búsqueda predictiva, que sugiere los mensajes o archivos que podría estar buscando incluso antes de escribir una consulta. La presentación cuidadosa de sus documentos y correos electrónicos es una noción anticuada.
Microsoft se ha estado poniendo al día con las herramientas de colaboración en los documentos de Google desde hace un tiempo. Office permite la colaboración entre aplicaciones móviles, de escritorio e internet, en lugar de obligar a todos a acceder mediante una pestaña del navegador.
Este rediseño organiza las opciones para compartir y trabajar en equipo en un solo rincón de la aplicación. Sin embargo, Google aún tiene una mejor colaboración: Office tiene ciertos problemas persistentes para guardar el trabajo de todos, y no ofrece funciones prácticas como el modo de sugerencia de Google.
¿Parecen obvios y atrasados todos estos cambios? Deberían parecerlo. Las aplicaciones más rápidas, las búsquedas extensas y el diseño más limpio han estado entre las razones por las cuales el servicio de Google creció tan rápido. No hay mucho para tentar a los usuarios de Google para que regresen al Office, aunque las medidas de Microsoft pueden ayudar a retener a las personas que aún no ha perdidos.
Traducido por Luis Felipe Cedillo
Editado por Michelle del Campo
Copyright © 2018 Dow Jones & Company, Inc. All Rights Reserved
Fecha de publicación: 23/07/2018