En el filme clásico de Pixar de 2004 ‘The Incredibles’ (Los Increíbles), hay una escena memorable que pareció descabelladamente futurista en ese momento: el Sr. Increíble toma una tableta de computación extremadamente delgada y ésta a su vez escanea su rostro para verificar su identidad antes de divulgarle su misión secreta.

Trece años más tarde, muchos teléfonos y tabletas delgadas se desbloquean con sólo pulsar la pantalla con un pulgar --y ahora ese tipo de exploración facial móvil está en camino.

Olvídese de las contraseñas e incluso huellas dactilares; los múltiples inicios de sesión; las tarjetas de crédito; y, eventualmente, incluso las llaves físicas de su casa y su automóvil.

Una nueva serie de computadoras portátiles y dispositivos móviles ahora pueden leer características faciales, la técnica está a punto de recibir un impulso debido al equipo especializado lo suficientemente pequeño como para que venga incluido en su teléfono inteligente.

Usar nuestras caras para desbloquear las cosas pronto podría convertirse en rutina, en lugar de ser únicamente dominio de los espías y súper héroes.

Qualcomm, un líder en la industria de los microcircuitos para dispositivos móviles, presentó recientemente su sistema de imágenes Spectra, el cual puede obtener información detallada de los objetos incluyendo caras. La empresa planea incluir esta tecnología en la próxima generación de sus procesadores móviles insignia Snapdragon.

La edición del décimo aniversario del iPhone de Apple, iPhone X, permite desbloquear el dispositivo con reconocimiento facial mediante una función que llevará por nombre Face ID.

Esta tecnología es diferente de, pero está relacionada con, el reconocimiento facial cada vez más incorporado en las cámaras de seguridad de todo el mundo, la cual compara las imágenes de su cara con una bases de datos de millones de rostros.

Esa tecnología está incrementando su capacidad y uso, particularmente en China, donde sus aplicaciones van desde la vigilancia hasta los pagos vía electrónica.

Afortunadamente, la cámara de su teléfono tiene algunas ventajas sobre el equipo de vigilancia. No necesita localizarlo en una multitud. Sólo necesita distinguir una cara --la suya-- y puede hacerlo muy bien, ya que la suya no es una figura sombría capturada con poca luz. Desde 10 o 20 centímetros de distancia, su teléfono puede captar rápidamente una imagen detallada.

Otra ventaja. La tecnología de detección de profundidad, generalmente llamada “luz estructurada”, rocía miles de pequeños puntos infrarrojos en la cara de una persona o cualquier otro objeto.

Mediante la lectura de las distorsiones registradas en este campo de puntos, la cámara recaba información de profundidad con una gran precisión. Dado que la cámara del teléfono puede detectar infrarrojos, pero los seres humanos no, éste sistema podría permitir que el teléfono sea desbloqueado en completa oscuridad.

     Apple no es ajena al mapeo de profundidad infrarrojo y al reconocimiento facial. La empresa ya posee patentes que describen procesos casi idénticos.

Ésta tecnología tal vez le puede parecer familiar, ya que es una versión reducida del sensor de movimiento Kinect del Xbox 360. Quizás no por casualidad, Apple adquirió un desarrollador primario de Kinect, la empresa de reciente creación israelita PrimeSense, en 2013.

Mientras tanto, Qualcomm ha dicho que planea hacer que su procesador Spectra esté disponible en los futuros teléfonos Android. Los anteriores procesadores de imagenes Samsung que podían realizar el reconocimiento facial podían ser engañados al poner una foto del rostro de alguien frente a la cámara del teléfono.

Qualcomm insiste en que la percepción de profundidad tiene la ventaja añadida de “detectar vivencias” Como resultado, una máscara impresa en tercera dimensión  no sería capaz de engañar al sistema, aunque la compañía admite que los gemelos idénticos sí podrían hacerlo.

Traducido por  Luis Felipe Cedillo

Editado por Michelle del Campo

                                                                                    

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Fecha de publicación: 09/10/2017